La "sala roja" donde 23 negociadores tratarán de lograr un acuerdo de izquierdas

    • El encuentro de esta tarde, promovido por IU, pone por primera vez frente a frente a las comisiones de PSOE y Podemos.
    • Las formaciones acuden a la cita con posturas "flexibles", aunque mantienen condiciones innegociables.
Imagen de la Sala Sert del Congreso de los Diputados, conocida como "sala roja".
Imagen de la Sala Sert del Congreso de los Diputados, conocida como "sala roja".

El simbolismo es total. El encuentro que esta tarde celebran las cuatro principales formaciones de izquierda para tratar de lograr un acuerdo de gobierno tiene lugar en la conocida como "sala roja" del Congreso de los Diputados, la sala Sert.

Una dependencia, antigua sede del Salón de Consejos del Banco Exterior de España, que históricamente viene siendo reservada para las ponencias encargadas de las reformas de los Estatutos autonómicos. La sala debe su nombre al color de las pinturas murales que la decoran, obra del catalán Josep María Sert (1874-1945). De reconocido prestigio internacional, Sert destacó no solo por sus pinturas, sino por su esfuerzo para salvaguardar las obras del Museo del Prado durante la Guerra Civil.Primer 'cara a cara' de los equipos negociadores de PSOE y Podemos

El encuentro se presenta decisivo y servirá para tantear el clima de la negociación entre PSOE y Podemos. El líder socialista, Pedro Sánchez, tiene los acuerdos ya prácticamente ultimados con IU-promotores del encuentro-y Compromís, pero es ésta la primera vez que su equipo de negociadores se reúne con el de la formación emergente. De hecho, la elección de los representantes de Podemos en este encuentro se ultimó a contrarreloj este mismo fin de semana, una vez que se determinó que la cita 'a cuatro' sería este lunes.

En el encuentro, que se celebra desde las 16.30 horas, participan 23 personas. Allí se sientan los negociadores del PSOE-siete- Podemos-ocho- Compromís-cuatro- e IU-cinco.

La comisión del PSOE es la misma que desde las últimas semanas viene participando en los distintos encuentros con las formaciones políticas. Encabezada por el portavoz en el Congreso, Antonio Hernando, el resto de la delegación la integran Rodolfo Ares, persona de máxima confianza del actual presidente del Congreso, Patxi López, José Enrique Serrano, director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno Felipe González y José Luis Rodríguez Zapatero, Meritxell Batet, número tres de Sánchez y coordinadora del programa, María Luisa Carcedo, responsable de Política Social del partido y Jordi Sevilla, portavoz económico.

Por su parte, Iglesias ha apostado por delegar el peso de esta reunión en su 'núcleo duro'. El equipo está formado por su número dos, Íñigo Errejón, la responsable del programa, Carolina Bescansa, su jefa de gabinete, Irene Montero, Rafael Mayoral, secretario de organización, el responsable económico del partido, Nacho Álvarez, y tres representantes de las confluencias territoriales con las que Podemos concurrió el 20-D. Xavier Domènech, portavoz de en Comú Podem, y Alexandra Fernández y Yolanda Díaz, de En Marea. Los socios gallegos han anunciado, no obstante, su intención de entablar conversaciones por separado con el PSOE para trasladar las propuestas específicas de su comunidad.

Por parte de Compromís e IU sí estarán presentes sus máximos dirigentes, Joan Baldoví y Alberto Garzón, respectivamente. Garzón, promotor de este encuentro, ha pedido a los participantes que se presenten a la reunión con una postura flexible para tratar de alcanzar un acuerdo "de progreso". El próximo coordinador federal de IU mantiene que esta cita es clave para tratar de desatascar el diálogo y recoger el mandato de las urnas de las pasadas generales.

En la carta remitida la pasada semana a PSOE, Podemos y Compromís, el dirigente republicano señalaba que "la situación española es de emergencia social" y pedía "no cerrar los ojos" ante la realidad salida del 20-D, cuando el PP perdió la mayoría absoluta.

Las posiciones más encalladas siguen siendo las de PSOE y Podemos. Iglesias, no obstante, ha asegurado este mismo lunes que su partido "no se levantará de la mesa" y que acude dispuesto a negociar sin líneas rojas. El líder emergente sí insiste, no obstante, en su intención de ocupar la vicepresidencia del futuro gobierno, el motivo que, a día de hoy, obstaculiza el entendimiento con los socialistas.

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