Congreso. Nueve de la mañana. La bancada azul, en la que se sienta el Gobierno, vacía. En el atril del Hemiciclo, un ministro que lleva semanas apagando un fuego tras otro: el de Economía. Diez de la mañana. Los escaños azules siguen vacíos. Y Luis de Guindos sigue solo en el atril defendiendo una de las reformas más importantes del Gobierno del PP: la reforma financiera.
El Congreso de los Diputados debate esta mañana la convalidación del real decreto ley sobre la reforma financiera. Un debate que ha coincidido en el tiempo con las amenazas de rescate de la banca española, con el BCE poniendo a España en una difícil situación por esta crisis y con máximos de la prima de riesgo nunca conocidos en España.
Ningún ministro ha acudido esta mañana a primera hora a respaldar a su compañero de Gobierno, que ha tenido que hacer frente a duros ataques del PSOE.
PP y PSOE han pactado anteriores reformas financieras. Pero este jueves, De Guindos también podría quedarse solo en este sentido: todo apunta a que esta reforma saldrá del Congreso sin el apoyo de ningún partido de la oposición.
El PSOE se debate entre el voto en contra y la abstención. Se quejan de que el Gobierno no ha negociado con ellos. Pero las negociaciones de última hora siguen abiertas y ambos partidos intentan acercar posturas mientras se celebra el debate en el Pleno del Congreso y todo puede pasar.
CiU, en principio, se decanta por la abstención aunque no se descarta el voto a favor si es necesario. El resto de las formaciones votarán en contra.
Un debate muy caliente
El enfrentamiento entre Luis de Guindos y el portavoz del PSOE en materia económica, el exministro Valeriano Gómez, ha sido muy intenso. Gómez ha despertado los aplausos de la bancada del PSOE en varias ocasiones.
El exministro ha pedido que la Fiscalía comience a actuar para depurar responsabilidades en la crisis financiera; ha instado al Gobierno a que impida que directivos de bancos intervenidos puedan cobrar "ni un euro" hasta que no lo ordene el Supremo y ha pedido que se convoque una Conferencia de Presidentes.
Luis de Guindos, al que también se le ha visto acalorado en alguna ocasión, ha tendido la mano al PSOE y se ha mostrado dispuesto a hablar sobre algunas de las exigencias de los socialistas, como la de dar una solución a las participaciones preferentes.
Y en varias ocasiones ha apelado a la necesidad de consenso en esta reforma. "Si ustedes [PSOE]votan en contra de esta reforma no apoyarán el saneamiento de los bancos españoles".
Voces a favor de un pacto
El resto de formaciones han subido a la tribuna para mostrar su rechazo a la forma financiera. Y algunas de ellas han instado a la necesidad de que PP y PSOE se pongan de acuerdo para sacar a España de esta difícil situación.
UPyD y CiU han sido los más claros al respecto. Rosa Díez, líder de UPyD, ha abogado por un pacto de Estado.
"Busquen el consenso político y recuperen la credibilidad de la banca española" ha dicho Josep Sánchez Llibre, portavoz económico de CiU. "Somos capaces de salir de esta situación, pero tienen que cambiar el chip. Aunque el PP tenga mayoría absoluta, no tienen mayoría política. Busquen acuerdos", ha añadido.
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