La UCO investiga a otro exconsejero de Aguirre por el amaño de un concierto

La Unidad Central Operativa de la Guardia Civil investiga a a Santiago Fisas, exconsejero de Esperanza Aguirre, por el amaño de un concierto. De hecho le atribuye varios delitos relacionados con la corrupción.

Eurodiputado del Partido Popular y Secretario de Estado para el deporte con José María Aznar, es investigado por su papel en la firma de un contrato investigado en el marco de la operación Púnica.

En un informe que obra en el sumario, los investigadores consideran que pudo cometer delitos de prevaricación, tráfico de influencias y malversación de caudales públicos por firmar un contrato con Waiter Music en 2007, cuando era consejero de Cultura y Deportes de la Comunidad de Madrid bajo el gobierno de Esperanza Aguirre.

El 15 de noviembre de 2006, el dueño de Waiter Music, el imputado José Luis Huerta Valbuena, firmó con la sociedad GPE (que tenía los derechos del concierto) un contrato para que el espectáculo viajara a España. GPE recibió de Waiter 522.000 euros.

Un mes después, en diciembre de 2006, la Comunidad de Madrid creaba la Fundación Arpegio, presidida por el presidente de Arpegio (la empresa pública de suelo), que en esa época era Francisco Granados, el principal dirigente político imputado en el caso. Carmen Plata fue elegida directora gerente de la fundación.Aguirre, presionada, dimitió

Con la soga al cuello. Así se sentía Esperanza Aguirre después de ver cómo gran parte de su equipo haya sido imputado por corrupción. Hace una semana decidió dimitir como presidenta del PP de Madrid, días después de conocerse los registros a la sede del partido por presunta financiación ilegal en el marco de la trama Púnica y de su propia comparecencia en la Asamblea de Madrid, precisamente para hablar sobre corrupción. 

Aguirre anunció su renuncia en una rueda de prensa imprevista y convocada de urgencia en la sede nacional de la calle Génova. La también concejal en el Ayuntamiento de Madrid basó la dimisión en la "responsabilidad política" que considera, debe asumir, por haber sido la encargada de designar a varios cargos políticos investigados, entre ellos, ha destacado, quien fuera su mano derecha en la Comunidad, Francisco Granados, en prisión desde octubre de 2014. "La gente espera gestos y el mío es dimitir", ha destacado.

"Las investigaciones parecían afectar a una etapa en la que él era alcalde de Valdemoro, ahora parece que sí afectan a una etapa en la que fue secretario general del PP de Madrid", ha admitido. Aguirre ha asumido su responsabilidad por haberle propuesto y ha reconocido que "el hecho de que un juez le mantenga en prisión durante tanto tiempo es un dato que nos hace pensar que algo grave debe tener". 

La dirigente popular reconoció que debería haber "vigilado mejor de lo que he vigilado" la actividad de sus cargos designados, si bien ha apostillado también que no le “consta” que haya habido financiación ilegal en el PP de Madrid. “En el PP hay un tesorero, un contable, y un secretario, y yo no tengo firma ni tarjeta. Y por eso, los encargados de gestionar los asuntos económicos eran otros. No tengo ninguna responsabilidad directa en esas actuaciones, pero sí una responsabilidad política que asumo", ha reiterado. Aguirre ha pedido, no obstante, prudencia en espera de que los tribunales determinen las posibles responsabilidades sobre informaciones que, ha dicho, "habrá que confirmar y calibrar", aunque sí ha reconocido que las noticias de corrupción hace que "no llueva sobre mojado, llueva sobre una inundación" y que los ciudadanos demandan "gestos" como el suyo.