La UE apuesta por un objetivo "ambicioso y realista" de reducción de pobreza

Luxemburgo.- La UE pretende rebajar el número de ciudadanos que viven en riesgo de pobreza en al menos 20 millones de personas durante la próxima década, un objetivo "ambicioso y realista" que fue acordado hoy por los ministros europeos de Empleo y Asuntos Sociales.

Los Veintisiete han respaldado la inclusión de este objetivo específico dentro de la estrategia económica comunitaria para 2020, una iniciativa que partió de la presidencia española, según destacó la ministra española de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez.

Aunque se trata de un objetivo "muy ambicioso" y que entraña "grandes dificultades", el hecho de que los Veintisiete hayan decidido trabajar juntos en esta dirección "constituye un paso muy importante", subrayó Jiménez en rueda de prensa, tras presidir el Consejo de Empleo y Asuntos Sociales donde se aprobó la propuesta.

Por su parte, el comisario europeo de Empleo, Asuntos Sociales e Inclusión, Laszlo Andor, calificó el objetivo de "ambicioso a la vez que realista", retomando los términos utilizados en el borrador elaborado por la presidencia y debatido hoy.

Además de la citada cifra, los ministros han respaldado la ampliación de la definición de "personas en riesgo de pobreza" para que ésta se ajuste más a las particularidades de cada Estado miembro.

Por primera vez, los Veintisiete utilizarán "indicadores comunes" para evaluar la situación de la pobreza en cada país, subrayó Jiménez.

Los ministros han acordado añadir dos nuevos criterios a la definición del grupo de población "en riesgo de pobreza", que hasta ahora sólo se aplicaba a aquellas personas cuyos ingresos son inferiores al 60% de la media nacional.

Según la nueva definición, también se considerará como "población en riesgo de pobreza" a aquellas personas que no puedan costearse una serie de bienes y servicios considerados fundamentales -como un alquiler, un automóvil o alimentos básicos-, así como las familias donde todos sus miembros en edad de trabajar estén desempleados.

Si se tienen en cuenta los tres citados criterios, el número de ciudadanos europeos en situación de pobreza ascendería a 120 millones, según datos de 2008, los últimos que ha facilitado Eurostat, la oficina comunitaria de estadística.

No obstante, el número actual sería sensiblemente superior, debido al impacto de la crisis económica internacional, y en particular, a la escalada del paro en la UE.

"Si queremos empezar a trabajar desde ya (en la reducción de la pobreza), hemos de tener en cuenta los datos de 2008, que son los que hay disponibles", señaló Andor.

A juicio del comisario europeo, sería "poco realista" llamar "pobres" a los citados 120 millones de personas.

"Sería más apropiado llamarlos personas viviendo con desventaja social", precisó.

De cara a alcanzar la meta comunitaria en 2020, los estados miembros tendrán libertad para establecer sus propios objetivos nacionales, "teniendo en cuenta sus propias circunstancias y prioridades", según el texto aprobado hoy por los Veintisiete.

El documento hace una mención especial a la relación entre la pobreza y la exclusión del mercado laboral, así como a la necesidad de "dar una perspectiva de género" a la lucha contra la pobreza, según destacó la ministra española de Igualdad, Bibiana Aído, quien también intervino en el consejo.

La lucha contra la discriminación de todo tipo no sólo responde a la necesidad de mejorar la inclusión social en la UE, sino también "a mejorar la competitividad europea", añadió el comisario europeo.

Por último, los ministros propusieron que en 2015 se haga un evaluación "a medio plazo" de los progresos realizados por cada país hacia el objetivo.

El objetivo deberá ahora ser aprobado formalmente por los Veintisiete en la cumbre de líderes europeos que se celebrará la semana que viene en Bruselas.