Libia. Jiménez suscribe que la solución no es militar sino política y "sin gadafi"

La ministra de Asuntos Exteriores y Cooperación, Trinidad Jiménez, avaló hoy la tesis de que la solución para el conflicto de Libia no puede ser únicamente militar, sino que se requiere una "solución política sin Gadafi", y por ello se ha de intensificar la presión diplomática aunque la intervención que prorrogará mañana la Comisión de Defensa del Congreso "se mantiene en los mismos parámetros".
En su intervención para resumir las conclusiones de la reunión que mantuvo hoy con los embajadores españoles en la zona, en la que también estuvieron la ministra de Defensa, Carme Chacón, y el ex secretario general de la OTAN y ex Alto Representante para la Política Exterior de la UE, Javier Solana, Jiménez dijo que los movimientos en Oriente Medio suponen "un nuevo paradigma", el del paso de regímenes autoritarios a democráticos. No obstante, la ministra aclaró que hay diferencias por países y zonas, y sobre todo señaló a Libia como un "caso particular".
La titular de Exteriores subrayó que no se trata de "un proceso de carácter coyuntural", sino que "hay que verlo a largo plazo" como una oportunidad para la consolidación de la paz y la democracia en la zona. "La UE tiene que asumir ese reto", conjuró. "No podemos perder una oportunidad histórica".
Jiménez también apuntó que el conflicto palestino-israelí "sigue estando presente en todas las conversaciones" con los países, sólo que la situación "puede cambiar muchos de los equilibrios que ha habido hasta ahora" y ambos bandos van a "tener que gestionar de otra manera sus relaciones" con aquéllos. Igualmente, constató que en la zona están aflorando "nuevos actores" políticos que hay que tener en cuenta y con los que España deberá "empezar a hablar" si desea mantener su interlocución y arbitraje tradicionales.
La ministra reconoció que en el proceso de democratización puede haber factores de riesgo como los flujos de inmigración incontrolada, el terrorismo yihadista, la trata de personas y el tráfico de armas. Por ello, instó a aprovechar todos los instrumentos multilaterales que pueden ser útiles, desde la Unión por el Mediterráneo hasta el Diálogo 5x5, pasando por el diálogo entre el Mediterráneo y la OTAN.
Seguidamente, Jiménez pasó revista a las iniciativas humanitarias realizadas por España, que incluyen 300 millones para créditos blandos a través del Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo, la repatriación de ciudadanos egipcios, el corredor de alimentos a Bengasi y los dos millones de ayuda a Yemen a través del Progama Mundial de Alimentos. A nivel comunitario, llegó a sugerir la creación de un Banco Euromediterráneo.
Por último, Jiménez abordó el ámbito consular e instó a los viajeros a registrarse en la web del Ministerio avisando siempre de dónde están para que sea posible contactar con ellos en tiempo real en el caso de que se produzca una situación de emergencia, siempre dentro de la escasa cobertura que tienen las nuevas tecnologías en muchos de estos países. Para difundir esta iniciativa, barajó la posibilidad de realizar una campaña de información.