Los abogados cobraban el 'impuesto revolucionario' e informaban sobre objetivos como Urkullu y tres escoltas

Los tres abogados de ETA enviados ayer a prisión por el juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska por actuar como correos entre la dirección de la banda y sus presos intermediaban en la "gestión y cobro" del 'impuesto revolucionario' e informaban sobre posibles objetivos como el presidente del Partido Nacionalista Vasco (PNV),Íñigo Urkullu, otros cargos de la formación nacionalista y tres escoltas de cargos públicos.

En el auto, Marlaska detalla cómo eran los "correos". Algunos de los documentos que ETA mandaba a sus presos o que estos enviaba a las estructuras de la banda, se encontraron,dispuestos a modo de "canutillos" y envueltos en plástico, en las instalaciones de los despachos de abogados, despuésde que se hubieran ocultado en un secador de manos del baño, unapercha, una caja de grapas, un tarro de cerámica o la estructura de unasilla.

Los despachos de abogados, según Marlaska, funcionaban como "uncentro logístico de distribución de documentos de ETA" cuyo contenido"informa sobre la labor desarrollada en apoyo de la organizaciónterrorista mucho más allá de las loables funciones de defensa ejercidascon carácter complementario".

Así consta en el auto dictado por Grande-Marlaska por el que acuerda el ingreso en prisión de los abogados Jon Enparantza, Arantza Zulueta e Iker Sarriegui, así como de Saioa Aguirre Arauco y Naia Zurriarain Mendiguren, que trabajaban en sus despachos. Todos ellos estaban "integrados dentro de la organización terrorista ETA"y participaban "activamente" en las labores que la dirección les encomendaba.

La resolución judicial detalla que entre la documentación incautada a los detenidos se encuentra una carta de Jon Enparantza, alias 'Mik Mik', en la que exponía su opinión sobre la "lucha armada" y defendía su "propuesta de cometer atentados contra altos cargos del PNV, citando expresamente a Íñigo Urkullu".

Este letrado también participó en el envío de informaciones a ETA sobre "posibles acciones terroristas, concretamente sobre tres vehículos que podrían corresponder a escoltas de cargos públicos". En el despacho de Arantza Zulueta también se recogieron "informaciones relativas a tres vehículos, a sus ocupantes y los itinerarios utilizados por los mismos".

En relación con el cobro del 'impuesto revolucionario', en el que "los abogados de la izquierda abertzale participaban activamente", el auto destaca que la Guardia Civil localizó 44.000 euros en el domicilio de Juan María Jáuregui Zalakain y otros 72.000 en posesión de Asier Etxabe Azkue. Formaban una red llamada 'Halboka'

Tanto los tres abogados detenidos como David Pla --supuesto líder del grupo y puesto ayer en libertad por las autoridades francesas-- y otros letrados de la izquierda abertzale como Iñako Goyoaga, Joseba Agudo o Amaia Izco estaban integrados en esta red, denominada 'Halboka' --siglas en euskera de "Hornak Apurtuz Laster Borrokalariak Kalea (Rompiendo las Paredes Pronto los Luchadores a la Calle)"-- y que sucedió en 2002 al denominado 'subaparato de makos'.

Sobre Pla, alias 'Mintxo', el auto detalla que el 17 de mayo de 2008 mantuvo una "cita orgánica" con los miembros del 'aparato político' de ETA Jon Salaberria e Igor Suberbiola desarrollada en la localidad francesa de Mimizan y a la que también acudieron otros "colaboradores legales" de la banda. Al día siguiente, la policía detectó "un movimiento extraño" al reunirse con el abogado Jon Enparantza.

Tanto Salaberria como Suberbiola formaban parte del aparato político de ETA que estaba dirigido por Francisco Javier López Peña, 'Thierry', y que fue desarticulado en Burdeos (Francia) en mayo de 2008.

A los detenidos también se les ha incautado documentación sobre el miembro de ETA Jorge García Sertucha, al que se relaciona con el intento de huída de la cárcel de Huelva en junio de 2009, así como una nota manuscrita del dirigente de ETA Aitor Elizaran Aguilar, detenido en Carnac (Francia) en octubre de 2009, en la que se hacía referencia a la muerte del etarra Jon Anza. "Nos ha aparecido Jon cadáver", decía. Libertad bajo fianza

El juez también acordó, tras más de siete horas de interrogatorios, la libertad de Juan María Jáuregui Zalakain y Asier Etxabe Azkue bajo fianzas de 30.000 y 12.000 euros, respectivamente, e impuso comparecencias judiciales a Erramun Landa Mendibe y José Luis Gallastegui Lagar. A los nueve les imputa un delito de integración o colaboración con organización terrorista.

Al décimo detenido, el ex etarra Domingo Aizpurua Aizpuru, alias 'Pitxas', el fiscal Luis Barroso no le imputó ningún delito ya que ya fue condenado en Francia por el análogo de asociación de malhechores. Todos los arrestados protagonizaron comparecencias breves ante el juez en las que fueron asistidos por abogados de oficio, al encontrarse incomunicados desde el momento de su detención.