Los dos F-18 españoles ya han vuelto de su primera misión en Libia

  • Dos de los cuatro aviones de combate F-18 con los que España contribuirá al establecimiento de la zona de exclusión aérea sobre Libia ya han realizado su primera misión en Libia. El objetivo de los cazas españoles es de realizar patrullas para que ningún avión entre en la zona. Tienen permiso para disparar.
lainformacion.com

Dos de los cuatro aviones de combate F-18 con los que España contribuye al establecimiento de la zona de exclusión aérea avalada por la ONU sobre Libia ya han vuelto a la base italiana de Decimomannu (en la isla de Cerdeña) después de haber realizado su primera misión en territorio libio.

Estos aparatos, que van armados con misiles aire-aire, tienen como misión asignada la de realizar patrullas sobre el espacio aéreo libio, para impedir que ningún avión hostil lo ocupe.

A mediodía de hoy, el avión de reabastecimiento en vuelo Boeing 707 y dos cazas F-18 del Ejército del Aire español desplegados en la base italiana de Decimomannu, al sur de la isla de Cerdeña, han despegado para realizar la primera misión de patrulla aérea de combate en el marco de la operación internacional en Libia.

"Los dos aviones están llevando a cabo misiones para contribuir al mantenimiento de la zona de exclusión aérea establecida por Naciones Unidas en el espacio aéreo libio", recuerda el Ministerio de Defensa.

El comandante del Mando de Operaciones español, teniente general Jaime Domínguez Buj, ha señalado que los aviones de combate y el avión de reabastecimiento están "en disposición de actuar en cualquier momento".

Las operaciones de los cuatro cazas F-18 y el avión de abastecimiento en vuelo actúan bajo el mando de la coalición internacional, que ostenta el general Carter Ham, comandante del AFRICOM, con cuartel general permanente en Stuttgart.

Despliegue naval

Además de los cuatro aviones F-18 y el avión de reabastecimiento en vuelo Boeing 707, al dispositivo de la OTAN para el embargo a Libia se sumarán la fragata Méndez Núñez, el submarino Tramontana y un avión de vigilancia marítima.

El submarino español Tramontana, con una dotación de 60 militares, ha partido esta mañana desde la base naval de Cartagena (Murcia) hacia las proximidades de Libia, en espera de que se decida el inicio de la operación de embargo.

Por su parte, la fragata Méndez Núñez continúa su travesía hacia Rota (Cádiz), a donde llegará el martes tras salir el domingo por la tarde de la base naval de Ferrol (Pontevedra). El acercamiento trata preposicionar a la nave más cerca de las costas libias.

El buque es el más moderno de que dispone la Armada y puede actuar desde una distancia lejana, dado su moderno sistema de comunicaciones y combate. Entre sus capacidades incluye un helicóptero SH-60B.

Por el momento se desconoce cuál será el emplazamiento exacto de los medios navales españoles para esta misión.

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