Los kurdos se preparan para recuperar Sinyar y Mosul de los yihadistas

Mosul/Bagdad, 5 ago.- Las fuerzas kurdas o "peshmergas" se están movilizando para recuperar varias zonas del norte de Irak, especialmente Sinyar y Mosul, en un intento de dar un golpe de fuerza a los radicales del grupo Estado Islámico (EI).

"Las tropas kurdas no se detendrán hasta expulsar al EI de Sinyar", prometió a Efe un alto responsable de los "peshmergas", el general Abdelrahman Kurini, que aseguró que tienen preparados a 20.000 efectivos para retomar las zonas arrebatadas.

Residentes de Sinyar dijeron a Efe que las fuerzas kurdas no habían accedido aún en la ciudad, en contraposición a lo afirmado previamente por un portavoz del Ministerio de los Peshmergas, el general Halkured Hikmat, que en la web del Partido Democrático del Kurdistán (PDK) informó de la entrada de sus tropas en esa localidad y la mayoría de las poblaciones vecinas.

Kurini precisó que los "peshmergas" están esperando la orden del presidente de la región autónoma del Kurdistán, Masud Barzani, para lanzar una fuerte ofensiva que les permita recuperar los citados territorios.

Por su parte, un portavoz del PDK, Said Memuzini, reveló que el "EI intentó controlar la presa de Mosul, a unos 400 kilómetros al norte de Bagdad, pero las fuerzas kurdas le hicieron retroceder y huir".

Asimismo, indicó que unos 250 combatientes del Estado Islámico perdieron la vida en las últimas horas en combates tanto en Sinyar como en las cercanas zonas de Kukyalil, Wan y Zumar, aunque esto no ha podido ser verificado de manera independiente.

El pasado 10 de junio, el EI se hizo con el control de Mosul, la segunda ciudad de Irak, situada en el norte del país, y a partir de entonces continuó con su conquista hacia otras regiones, entre ellas Sinyar, lo que les acerca al último paso fronterizo con Siria que les falta por dominar.

El EI tiene en sus manos grandes zonas del norte de Siria e Irak, donde declaró un "califato" a finales de junio pasado, aplicando una interpretación radical del islam.

Para evitar su expansión, el primer ministro, el chií Nuri al Maliki, anunció ayer que las fuerzas aéreas iraquíes apoyarán a los "peshmergas" para recuperar los territorios ocupados por los radicales suníes liderados por el EI, a pesar de las tensiones con las autoridades kurdas en los últimos meses.

Al hacerse con el control de Sinyar hace dos días, el EI desencadenó una crisis humanitaria que ha sido denunciada por la ONU, ya que los residentes de la ciudad tuvieron que huir a las montañas de los alrededores y aún permanecen atrapados allí.

Se calcula que unos 200.000 civiles se encuentran desplazados, la mayoría kurdos pertenecientes a la comunidad religiosa yazidí.

De ellos, más de 80.000 yazidíes necesitan "ayuda urgente debido a las circunstancias trágicas en las que sobreviven", denunció el presidente de una organización no gubernamental independiente de derechos humanos, Dia Butrus.

El activista aseguró que se está produciendo un "daño considerable" a muchas familias, sobre todo por la ausencia de alimentos y agua potable y por las altas temperaturas.

Butrus pidió a las autoridades iraquíes que presten helicópteros de la aviación militar para transportar material y agua a los afectados.

Según la fuente, 72 menores y un anciano han fallecido por falta de agua y más de 10.000 personas desplazadas a los montes de Sinyar necesitan "ayuda de emergencia".

El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) redujo la cifra de fallecidos a cuarenta menores yazidíes, al tiempo que mostró su preocupación por la muerte de niños "como consecuencia de la violencia, el desplazamiento y la deshidratación en los últimos dos días".

El representante del UNICEF en el país, Marzio Babille, apuntó que unos 25.000 menores están atrapados actualmente en las montañas de Sinyar, por lo que pidió permitir a los niños y mujeres que se refugien en lugares seguros de acuerdo al derecho internacional humanitario.