Los partidos calientan motores para un debate sobre la corrupción y la crisis

  • El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y los portavoces de los grupos parlamentarios ultiman hoy sus estrategias y discursos de cara al debate sobre el estado de la nación que comienza mañana en el Congreso, con la corrupción política y la profunda crisis económica como telón de fondo.

Madrid, 19 feb.- El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y los portavoces de los grupos parlamentarios ultiman hoy sus estrategias y discursos de cara al debate sobre el estado de la nación que comienza mañana en el Congreso, con la corrupción política y la profunda crisis económica como telón de fondo.

Fuentes del Gobierno han asegurado que Rajoy, que se estrena mañana en este tipo de debates como jefe del Ejecutivo, se comprometerá a liderar la lucha contra la corrupción, con medidas concretas para erradicar esta lacra.

Además de hacer un repaso de las reformas emprendidas en su primer año de Gobierno, también se espera que Rajoy desgrane nuevas medidas económicas, entre ellas un paquete destinado a las pequeñas y medianas empresas, con el objetivo del crecimiento económico y la creación de empleo.

Para el jefe del Ejecutivo las pymes son el motor que necesita España para la salida de la crisis.

En esta misma línea, el portavoz del PP en el Congreso, Alfonso Alonso, confía en que la "clave" del debate no gire únicamente en los últimos casos de corrupción que, a su juicio, "tienen que ver con el pasado", sino en las reformas económicas que anunciará Rajoy dirigidas a impulsar el crecimiento y la recuperación económica.

El debate debe ser, según Alonso, el inicio del camino hacia la recuperación de la confianza de los españoles en sí mismos, una vez recobrada la credibilidad de España en el exterior.

Argumentos rechazados de plano por la portavoz parlamentaria del PSOE, Soraya Rodríguez, que cree que Rajoy llega al debate de mañana con "cero credibilidad" política y personal.

Rodríguez reconoce que su partido hará "todos los esfuerzos" para que el debate sobre el estado de la nación no se convierta en un monográfico "sobre la corrupción del PP", aunque ha admitido que es inevitable que salga este asunto.

Quiere el PSOE que la cita parlamentaria sirva para poner negro sobre blanco la situación de España después de catorce meses de Gobierno del PP en el que, a su juicio, todo está peor.

De momento, los socialistas no han adelantado si Alfredo Pérez Rubalcaba volverá a reclamar la dimisión de Rajoy, aunque sí aseguran que el líder del PSOE presentará también propuestas constructivas.

Desde UPyD, Carlos Martínez Gorriarán ha anunciado que su grupo no eludirá ningún asunto del debate, incluida la corrupción que, en su opinión, ha convertido el país en una "ciénaga" en la que ninguna institución está "libre de sospecha", desde la Corona hasta los ayuntamientos.

Pese a ello, confía en que el debate no se convierta en una discusión sobre el "y tú más", sino que haya una reflexión sobre las medidas que son necesarias para atajar el problema.

Por su parte, el portavoz del PNV, Aitor Esteban, ha avanzado que su intervención girará en torno a la corrupción política, la crisis económica y la exigencia al Gobierno para que no interfiera en las competencias autonómicas.

El "conflicto vasco" centrará la intervención de Amaiur, en la que denunciará la "parálisis" del Gobierno en este asunto.

Pese a ello, el diputado de Amaiur Rafael Larreina ha explicado que su formación ofrecerá una "mano tendida" a Mariano Rajoy.

El presidente del Congreso, Jesús Posada, confía en que la cita parlamentaria más importante del año sea un "debate de categoría", al nivel de lo que la sociedad demanda de sus representantes y que transcurra con "cortesía" por parte de todos.

"Creo que se pueden decir las cosas más duras que haya que decir, porque la realidad política y económica exige a veces ser duros, pero con cortesía, sin gritos y sin interrupciones", ha explicado Posada en los pasillos de la Cámara.

El Congreso de los Diputados acoge desde mañana y hasta el jueves este debate, que se abrirá al mediodía con la intervención de Rajoy y continuará por la tarde con el esperado "cara a cara" entre el presidente y el líder socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba.

Rajoy tiene tiempo ilimitado para su discurso, mientras que cada portavoz de los grupos parlamentarios cuenta con 35 minutos para una primera intervención, y otros diez para un turno de réplica.

Tras los dos primeros dos días de debate, los grupos parlamentarios tendrán de plazo hasta el viernes para presentar sus propuestas de resolución, quince por grupo.

El pleno del Congreso debatirá las propuestas de resolución derivadas de este debate el martes 26 de febrero.

Mostrar comentarios