Los Príncipes de Asturias presiden la entrega de Reales Despachos en Marín

Marín (Pontevedra).- Los Príncipes de Asturias han presidido esta mañana la jura de bandera de los aspirantes y la entrega de los Reales Despachos de la Escuela Naval Militar de la Armada Española en Marín.

El acto castrense se ha iniciado con la revista por parte del Príncipe Felipe a guardiamarinas y aspirantes formados en la explanada principal del centro.

En total han jurado bandera 52 alumnos del Cuerpo General y 11 del Cuerpo de Infantería de Marina y, además de los galardones a los alumnos más destacados, un total de 66 de distintos cuerpos recibieron los Reales Despachos.

Por primera vez en la historia de esta Escuela militar no se han incluido celebraciones religiosas en el protocolo, aunque previamente tuvo lugar una misa de carácter voluntario, en la que se cantó la Salve marinera, de acuerdo con la reciente modificación del reglamento de honores militares.

Los actos han sido presenciado por unas 3.000 personas desde las gradas instaladas a tal efecto, que han ocupado un nutrido grupo de familiares de los aspirantes y guardiamarinas.

El acto presidido por los Príncipes de Asturias ha contado con la presencia de numerosas autoridades civiles y militares, entre las que se encontraban el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo; la presidenta del Parlamento de Galicia Pilar Rojo; el delegado del Gobierno, Antón Louro, y el alcalde de Marín, Francisco Veiga.

Los Príncipes llegaron al recinto castrense a las once y media de la mañana como estaba previsto, y subidos al podio escucharon los honores de ordenanza.

Tras escuchar el himno de España, el Príncipe Felipe pasó revista al batallón de alumnos formado en la explanada y saludó a continuación a las autoridades presentes para ubicarse en el lugar preferente para presidir el acto.

Este se inició con el homenaje a los que dieron su vida por España ante la Cruz instalada en la escalinata de ceremonia y a los acordes de la banda de música que acompañó el canto de Ofrenda a los Caídos que terminó con una salva de disparos de fogueo.

El arzobispo castrense intervino para pronunciar una oración de 'Acción de Gracias' en la que pidió a Dios ayuda por los nuevos oficiales a la hora de cumplir su cometido "con justicia, lealtad y superación", y protección para que puedan convertirse "en vigilantes de la paz".

Antes del canto del himno de la Armada intervino en la tradicional alocución el comandante director de la Escuela Naval, Marcial Gamboa, que agradeció la presencia los Príncipes de Asturias y de las autoridades civiles y militares.

El comandante director se dirigió a los nuevos guardiamarinas para recordarles el significado del gesto de su juramento o promesa por el compromiso que ello supone para su propio futuro y para España.

Marcial Gamboa les animó a seguir preparándose con interés y les conminó a que se mentalicen durante los años de preparación que les quedan de que el oficio elegido "requiere abnegación, sacrificio y muchas renuncias, tanto personales como familiares".

A los nuevos oficiales les felicitó por haber llegado a la meta que se fijaron al comienzo de su carrera, pero les recordó que es a partir de ahora cuando se le requerirá "valor, lealtad y compromiso".