Manifestantes bloquean uno de los accesos al estadio de Fortaleza

  • Unos 250 manifestantes bloquearon temporalmente hoy una de las vías de acceso al estadio Castelao de la ciudad brasileña de Fortaleza, escenario del partido entre España y Nigeria por la Copa Confederaciones, para protestar por las altas inversiones del Gobierno en el Mundial de Fútbol de 2014.

Río de Janeiro, 23 jun.- Unos 250 manifestantes bloquearon temporalmente hoy una de las vías de acceso al estadio Castelao de la ciudad brasileña de Fortaleza, escenario del partido entre España y Nigeria por la Copa Confederaciones, para protestar por las altas inversiones del Gobierno en el Mundial de Fútbol de 2014.

La protesta, una de las muchas por mejores servicios públicos que sacuden a Brasil desde hace dos semanas, interrumpió el tránsito de vehículos por la avenida Alberto Craveiro, una de las principales vías de acceso al Castelao, cuando faltaba una hora para el inicio del partido.

Los aficionados, sin embargo, enfrentaron pocos problemas para llegar al estadio debido a que la policía desvió el tránsito por otras vías y a que la mayoría prefirió llegar temprano al Castelao para evitar problemas.

La protesta, a unos 2,5 kilómetros del Castelao, fue convocada para criticar las costosas inversiones y los posibles desvíos de recursos públicos en la construcción de los estadios que la FIFA exigió a Brasil como sede del Mundial de 2014 y de la Copa Confederaciones, que comenzó hace una semana y por la que el domingo se disputaban los partidos España-Nigeria y Uruguay-Tahití.

Los manifestantes taponaron la vía por cerca de media hora pero se abstuvieron de avanzar hacia el estadio como algunos querían, debido a que la policía montó un cerco para cerrarles el paso.

Tras una rápida negociación con la policía, los manifestantes cambiaron su curso y se dirigieron a una vía de acceso al aeropuerto internacional de Fortaleza, con lo que generaron retenciones para personas con vuelos marcados que se dirigían a la terminal aérea.

Además de Fortaleza, para este domingo también hay manifestaciones programadas en las ciudades de Río de Janeiro, Ribeirao Preto, Porto Alegre y Brasilia.

Pese a que perdieron intensidad desde el jueves, cuando movilizaron a cerca de 1,2 millones de personas en un centenar de ciudades, las manifestaciones, apoyadas por el 75 % de los brasileños según una encuesta divulgada el sábado, se mantienen en las calles.

Ni la invitación al diálogo y a un pacto nacional para mejorar los servicios públicos hecha por la presidenta Dilma Rousseff el pasado viernes, ni la reducción de las tarifas de transporte público en las mayores ciudades, que era la reivindicación inicial de los manifestantes, han convencido a los brasileños a cesar las marchas.

Las protestas comenzaron la semana pasada en Sao Paulo, exclusivamente contra la subida de las tarifas de transporte público, pero ganaron otras reivindicaciones, como mayores inversiones en la salud y la educación pública, y críticas contra la corrupción y los elevados gastos del Gobierno para organizar eventos como el Mundial de Fútbol de 2014.

Mostrar comentarios