Ministro sirio de Exteriores viaja a Rusia para consultas sobre plan de paz

Moscú, 9 abr.- El ministro de Exteriores de Siria, Walid al Mualem, llega hoy a Moscú para mantener consultas con los dirigentes rusos sobre el cumplimiento del plan de paz presentado por el mediador internacional, Kofi Annan.

Según informó a Efe un portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, Mualem se reunirá mañana, martes, con su colega ruso, Serguéi Lavrov.

Rusia "trabaja activamente con Damasco para comenzar un proceso de arreglo político. Los intentos de forzar una solución en Siria desde el exterior únicamente conducirá a una escalada de tensión", aseguró hoy Guennadi Gatílov, viceministro de Exteriores.

El diplomático ruso aseguró que "violencia debe cesar", según citado por la agencia oficial Itar-Tass.

La visita tiene lugar después de que el régimen sirio de Bachar al Asad planteara el domingo condiciones para cumplir los seis puntos incluidos en el plan de Annan, entre los que figuran la retirada de las tropas de las ciudades y el cese del fuego.

Damasco, que tiene hasta mañana para aplicar el plan, exige garantías por escrito de que los que llama "grupos terroristas" cesarán la violencia.

El Gobierno sirio aseguró que no quiere repetir el error que cometió cuando la misión de observadores de la Liga Árabe visitó el país, lo que fue aprovechado por los grupos rebeldes para reorganizarse.

Al respecto, Annan se manifestó hoy "consternado por los recientes informes que indican un aumento de la violencia y las atrocidades en diferentes ciudades de Siria".

"Esto viola lo acordado conmigo. Conforme nos vamos acercando a la fecha límite del 10 de abril, recuerdo al Gobierno sirio acerca de la necesidad de implementar íntegramente sus compromisos", afirmó.

Rusia, quien ha rechazado los llamamientos a la renuncia del presidente sirio, Bachar al Asad, informó la pasada semana de que Siria le había asegurado de que ya había comenzado a aplicar el plan.

Además, pidió al Consejo de Seguridad que apruebe el urgente envío de una misión de observadores para garantizar el cumplimiento de las propuestas de Annan tanto por parte del Gobierno, como de los rebeldes.