Netanyahu tacha de "antisemitas" a aquellos que promueven el boicot a Israel

Jerusalén, 18 feb.- El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, calificó de "antisemitas" a aquellos que promueven en el boicot a Israel y dijo que este movimiento es particularmente un ultraje en Europa.

En un discurso pronunciado anoche ante un grupo de líderes judíos de Estados Unidos, el jefe del Ejecutivo israelí instó a luchar contra esta acción que promueve la plataforma Boicot, Desinversiones y Sanciones (BDS) y que ha comenzado a poner nervioso al Gobierno.

"Creo que los mas inquietante, lo más desgraciado es que haya gente en territorio europeo que hable acerca del boicot a los judíos. Creo que es ultrajante, pero es algo con lo que ya nos hemos topado", advirtió Netanyahu, citado hoy por la prensa local.

"En el pasado, los antisemitas boicotearon los negocios judíos y hoy instan a boicotear al Estado judío. Solo al estado judío", agregó.

Al hilo de este argumento, Netanyahu aseguró que los fundadores del movimiento BDS "tiene un objetivo claro. Quien ver el final del Estado judío. Han sido muy explícitos a este respecto"

"Y creo que es importante que los boicoteadores sean señalados como lo que son. Son antisemitas clásicos con un disfraz moderno. Y que creo que hay que combatirlo. Ha llegado el momento de deslegitimar a quienes deslegitiman", recalcó.

En los últimos meses, varios grandes bancos y fondos de pensiones europeos han decidido retirar sus inversiones de aquellas empresas y entidades que operan en las colonias levantadas en Cisjordania ocupada por Israel, ilegales según el derecho internacional.

Además, tanto diplomáticos como responsables europeos han advertido a Israel de que debe ser consciente de que pagará algún tipo de precio si el actual proceso de paz con los palestinos fracasa.

A este aviso se ha unido incluso el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, que promueve unas negociaciones que avanzan con muchas dificultades.

El boicot a Israel saltó a las primeras páginas de la prensa mundial el mes pasado después de que la actriz Scarlet Johansson participara en un anuncio de una marca de soda que tiene una fábrica en una colonia judía.

Presionada para que abandonara la campaña, la actriz prefirió seguir adelante y renunciar a su labor como embajadora de la ONG Oxfam.