Madrid, 27 nov.- Unas 500 personas se concentraron hoy en Madrid para rendir homenaje al dictador Francisco Franco, en el 36 aniversario de su muerte, y reclamar la necesidad de articular una alternativa política les aglutine.
Los asistentes al acto, que estaba previsto para el domingo día 20, pero se pospuso debido a la coincidencia con las elecciones, se presentaron como los "nuevos indignados", en referencia al conocido como Movimiento 15-M, pero esta vez del patriotismo español.
Durante la concentración, convocada principalmente por Nudo Patriota Español, Movimiento Católico y Acción Juvenil y en la que se ha leído una carta del líder ultraderechista Blas Piñar, se ha criticado que el Partido Socialista quiera "dinamitar" el Valle de los Caídos, el mayor símbolo franquista, situado a unos 50 kilómetros de Madrid.
Dentro de la basílica erigida en ese lugar se encuentran las tumbas del fundador de la Falange Española, José Antonio Primo de Rivera, y de Franco.
Los asistentes, para quienes la crisis que afecta a España no es sólo económica, sino también "ideológica y moral", reclamaron la disolución de los Gobiernos regionales, el fin de la monarquía, la salida del euro, la nacionalización de la banca, la anulación de la ley del aborto y de los matrimonios homosexuales.
Asimismo, denunciaron la "herencia lamentable" dejada por el Partido Socialista, que lleva dos legislaturas en el poder en España y es el gran perdedor de las elecciones del pasado domingo, ganadas por mayoría absoluta por el conservador Partido Popular (PP).
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