Buenos Aires, 6 dic.- Algunos de los principales referentes de la oposición de Argentina expresaron hoy su rechazo a que la mandataria Cristina Fernández haya optado por continuar con la misma política económica al elegir como responsable de la cartera a un delfín del ministro saliente y vicepresidente electo, Amado Boudou.
"Evidentemente la decisión de la presidente ha sido darle continuidad a lo que se venía haciendo hasta ahora, independientemente de los nombres", señaló el extitular del Banco Central Alfonso Prat Gay, diputado por la Coalición Cívica.
El nuevo ministro de Economía es Hernán Lorenzino, un abogado de 39 años con formación como economista, que hasta ahora se desempeñaba como secretario de Finanzas y tenía a su cargo, entre otros delicadas tareas, la negociación con el Club de París para refinanciar la deuda del Estado.
En opinión de Prat Gay "el Gobierno hasta ahora ha hecho exactamente lo contrario a lo que tenía que hacer frente a la crisis: subió la tasa de interés, congeló el dólar y subió los impuestos".
"Así que, en todo caso, esta continuidad es hacia una receta que no es buena en el marco de lo que sucede afuera", afirmó después de renovar su banca en la Cámara de Diputados.
Para el diputado de la conservadora Propuesta Republicana Federico Pinedo, la designación de Lorenzino también supone "una continuidad de la política económica de su jefe", Amado Boudou, quien este sábado asumirá como vicepresidente argentino para el segundo mandato de Fernández.
El portavoz presidencial, Alfredo Scoccimarro, anunció hoy en conferencia de prensa el nuevo gabinete, que se mantiene prácticamente sin cambios, con la incorporación de sólo tres ministros que ocupaban ya altos cargos.
"Evidentemente los únicos cambios son económicos", añadió Pinedo, quien recordó que el nuevo jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, "va a ser el responsable de administrar el presupuesto de la nación, ni más ni menos, y de usar los superpoderes para cambiar todo el presupuesto de acuerdo a las normas que se lo permiten".
A juicio de Claudio Lozano, diputado del Frente Amplio Progresista, la decisión de Fernández "está muy ligada a tratar de resolver los problemas de la economía argentina sobre la base de apelar al endeudamiento, a volver al mercado de capitales".
"Y francamente creo que eso sería un grave error, así que en ese sentido no lo compartimos. Me parece que la consolidación de Lorenzino implica haber tomado un camino complicado, que es que volver al ciclo de la deuda sea el camino de solución a la Argentina", consideró el legislador de centroizquierda.
Entre los ministros que han sido ratificados está el canciller Héctor Timerman, decisión que también ha despertado críticas entre la oposición.
"Me parece lamentable que permanezca Timerman, siendo el responsable de los mayores errores de política exterior que cometió la Argentina en los últimos tiempos", consideró el peronista disidente Eduardo Amadeo, quien asumió hoy como diputado.
No obstante, el legislador se mostró conforme con la designación de Abal Medina, de 43 años, hasta hoy secretario de Comunicación Pública, de quien aseguró tener "muy buen concepto".
"Es un tipo inteligente y bien formado y muy respetable. Creo que su designación es un intento de dar una imagen aún más joven del Gobierno de la señora", aseveró.
El nombramiento de Abal Medina es el que mejor recepción ha tenido entre la oposición.
El secretario general de la Coalición Cívica, Adrián Pérez, afirmó que esperan que suponga un "aporte importante" al debate político en representación de las "nuevas generaciones".
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