París, nuevo feudo de la izquierda por su renovación demográfica y social

Javier Alonso

París, 9 jun.- París, la capital de Francia y mayor ciudad del país, antiguo feudo de la derecha, se ha convertido en los últimos años en un granero de votos para la izquierda, que espera un nuevo avance en las elecciones legislativas del domingo.

"París era un feudo de la derecha y ya no lo es, eso está claro. Se está convirtiendo en una ciudad de izquierdas, desde el punto de vista de que es la que vota más a la izquierda de toda Francia", según Mathieu Jeanne, investigador del Instituto Francés de Geopolítica.

"Se ha convertido en un feudo de la izquierda, pero eso no significa que se haya garantizado ganar porque es una coalición hasta cierto punto frágil" dijo Jeanne en entrevista con Efe a propósito de los comicios legislativos, cuya primera vuelta se celebra este 10 de junio, y de las alianzas en ese ámbito político.

Ese investigador de la Universidad París VIII precisa que "ahora en la izquierda está el PS (Partido Socialista), que tiene que aliarse con los Verdes, que son muy fuertes en París, con un potencial electoral muy importante, y el Frente de Izquierdas, que es una alianza muy frágil".

Los sondeos publicados hoy indican que el PS podría alcanzar la mayoría absoluta en los comicios a dos vueltas (el 17 es la segunda y definitiva), que se celebran poco más de un mes después de la victoria del socialista François Hollande en las presidenciales.

Aunque apoyada en una composición demográfica que le beneficia, la situación para izquierda es "menos confortable de lo que fue para la derecha en el pasado" precisamente por la fragilidad de sus compañeros políticos, explicó Jeanne.

"Hay un cambio sociológico enorme y hoy esa es la nueva base sólida de la izquierda" en la capital, agregó al referirse al relevo de obreros y clase trabajadora por parte de profesionales más jóvenes, mandos intermedios que componen una nueva burguesía urbana.

"Paradójicamente podría creerse que la marcha de los obreros y los empleados de París habría sido una debilidad para la izquierda pero de hecho esta se beneficia de lo que se denomina la 'gentrificación'" o aburguesamiento.

"Ha habido una renovación de la población muy importante desde hace una veintena de años, comenzó en los años setenta y luego se aceleró en los años noventa y principios de siglo", según Jeanne.

"A largo plazo ha sido una sorpresa", confesó el especialista, que ha investigado la evolución del voto en la capital francesa y que considera que ese fenómeno de relevo social y demográfico de París "al principio perjudicó a la izquierda".

Pero la evolución detectada en París "es la misma que conocen todas las grandes ciudades, a excepción de las del arco mediterráneo como Marsella y Tolón", advirtió.

"Ha habido una evolución general que consiste en que en los centros de las ciudades viven sobre todo clases medias altas, jóvenes, con formación y que es una población más abierta en cuestiones sociales y menos sensible actualmente al discurso de la derecha".

"París es la ciudad más rica, la que ofrece más empleos para los licenciados, con más empleos del audiovisual, periodismo, profesiones artísticas, etc. Hoy todos los que trabajan en esos sectores son más bien favorables a la izquierda", opinó Jeanne.

La clara división por nivel de ingresos de los habitantes capitalinos -un oeste muy rico, sobre todo el distrito XVI por un lado y todo el este y norte de la ciudad por el otro- induce a considerar que "hay actualmente dos París, que son muy diferentes política y socialmente y eso da como resultado ese corte, esa fractura tan fuerte", según el investigador francés.

Lo paradójico del París actual tan dividido social, económica y políticamente es que esta situación la ha propiciado en parte la propia derecha, al introducir un nuevo reparto de circunscripciones electorales que consideró le iban a favorecer.

Esa nueva distribución "hecha por la derecha y que se suponía le iba a ser más favorable, no lo ha sido (...) Al final será la derecha la que pueda perder más", comentó Jeanne en previsión de los resultados de las legislativas.