París, 16 dic.- El Gobierno francés insistió hoy en que trabaja "de forma muy estrecha" con el Reino Unido y tiene "intención de continuar" haciéndolo pese a las divergencias de la última cumbre europea, en la que Londres se quedó solo al rechazar el acuerdo intergubernamental.
La exclusión del Reino Unido del acuerdo del Consejo Europeo del pasado día 9 fue "una decisión soberana de los británicos", comentó el portavoz del Ministerio francés de Exteriores, Bernard Valéro, que puso el acento en las pruebas de colaboración entre los dos países que no han quedado en entredicho por esas divergencias.
"Sobre las cuestiones globales, trabajamos de forma muy estrecha y tenemos intención de continuar", afirmó Valéro en conferencia de prensa, tras haberse negado a comentar unas supuestas declaraciones del presidente francés, Nicolas Sarkozy, sobre la actitud del primer ministro británico, David Cameron, en el Consejo Europeo, publicadas por el semanario "Le Canard Enchaîné".
El portavoz se esforzó en recordar episodios recientes en que París y Londres han ido de la mano, y en particular la operación internacional en Libia que terminó con el derrocamiento del régimen de Muamar El Gadafi.
"Eso muestra que sobre las cuestiones de defensa, de paz, de seguridad o energéticas, nuestra cooperación es densa, de calidad, antigua, en dinámica de desarrollo y de profundización", dijo.
También aludió a una reciente entrevista ofrecida por Sarkozy al diario "Le Monde" en la que aludía a que "necesitamos el Reino Unido", al que calificó de "socio estratégico".
En cuanto al acuerdo del pasado día 9, el portavoz francés señaló que "trabajamos para la puesta en práctica de las conclusiones" con los otros socios europeos.
Y preguntado sobre si eso se haría sin los británicos, señaló que a partir de las últimas actuaciones del Reino Unido este ha mostrado su intención de participar.
Según "Le Canard Enchaîné", Sarkozy acusó a Cameron de comportarse como un "niño terco" en las negociaciones de la pasada cumbre en Bruselas, "con una única obsesión: proteger la City (la plaza financiera de Londres), que quiere continuar comportándose como una plaza offshore".
"Ningún país le ha apoyado, es el signo de un revés político sin contestación", añadió el presidente francés siempre de acuerdo con la publicación.
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