Perals ve "coherente" subir la edad de acceso a las bebidas alcohólicas

Gijón.- El fiscal antidroga de Asturias, José Perals, ha abogado hoy por subir de los 16 a los 18 años la edad mínima para el acceso a las bebidas alcohólicas al considerar que "es coherente" con la normativa vigente en el resto del Estado y con la Ley Antitabaco.

En declaraciones a los periodistas formuladas esta mañana en un curso para formación de fiscales, Perals se ha manifestado a favor de un cambio en la legislación autonómica al ser Asturias la única comunidad que no ha subido la edad mínima para la compra de alcohol.

No obstante, el fiscal antidroga ha explicado que su "opinión personal" se fundamente en un "dictamen jurídico" y que no quiere "crear polémica" porque carece de "competencias" en materia política y legislativa.

Subir a los 18 años la edad para el acceso a las bebidas alcohólicas "es coherente con el resto del estado y con la Ley Antitabaco", ha afirmado el fiscal momentos antes del acto inaugural del curso de formación que se desarrolla hasta el miércoles en Gijón.

El Fiscal Superior de Asturias, Gerardo Herrero, ha inaugurado el curso acompañado por Perals y por el fiscal del Tribunal Supremo Salvador Viada, quien abrió la primera jornada con una conferencia sobre los procesos de admisión y denegación de pruebas en los juicios.

Según ha afirmado, la denegación de pruebas es uno de los factores en los que se basan la mayor parte de los recursos de las sentencias de primera instancia y el Supremo va en la dirección de flexibilizar este proceso en la forma y en los plazos previstos.

Según ha explicado Viada, la presentación y justificación de las pruebas es una parte fundamental cuya carga corresponde a cada una de las partes, aunque "muchas veces" y por "errores" se produce "indefensión".

La jurisprudencia dictada en los últimos años por el Tribunal Supremo y por el Constitucional abunda en la línea de permitir una mayor flexibilidad para subsanar los posibles errores, según ha expresado.

La conferencia de Viada sobre aspectos técnicos de los procesos judiciales abrió el curso, al que asisten unos 30 fiscales.