Piden que las ayudas por el veto ruso lleguen a 850.000 asalariados del campo español

Los sindicatos CCOO y UGT pidieron hoy al ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente la creación de un observatorio de seguimiento para cuantificar el daño al empleo derivado del veto ruso. También solicitaron que la Comisión Europea (CE) que incluya a los asalariados en el segundo reglamento de ayudas por el veto ruso y se contemplen medidas para este colectivo, formado por unos 850.000 trabajadores en España.
Así lo señaló el secretario general de la Federación Agroalimentaria de CCOO, Jesús Villar, en declaraciones a los medios tras la reunión mantenida esta tarde con el secretario general de Agricultura y Alimentación, Carlos Cabanas.
En esta reunión, los sindicatos demandaron la creación de un observatorio o una mesa continua para analizar cómo influye el veto ruso en el empleo. En este sentido, Villar lamentó que el empleo sea el "gran olvidado" de las medidas de la Comisión Europea (CE), al no contemplarse "ninguna medida paliativa ni preventiva", y explicó que CCOO pedirá a través del sindicato europeo que la CE y el parlamento europeo se impliquen en que las medidas del boicot ruso "no las paguen los asalariados españoles, italianos y franceses".
"VAN A TRABAJAR MENOS"
A este respecto, Villar explicó que, dentro del colectivo de asalariados del sector agroalimentario, se están viendo afectados por el veto ruso aquellos trabajadores que no son llamados a trabajar para las campañas de frutas y hortalizas y los fijos discontinuos. Por este motivo, pidió que estos trabajadores también sean compensados, puesto que "van a trabajar menos".
Así, recordó que, excepto en Andalucía y Extremadrua, los trabajadores asalariados del campo "a diferencia de cualquier otro sector, no tienen subsidio agrario", por lo que demandaron al Ministerio que reclame a la CE facilidad de acceso para estas personas a medidas compensatorias o a subsidios.
El cálculo para estas posibles compensaciones se trataría en el observatorio de seguimiento solicitado también a Agricultura, si bien podría tenerse en cuenta los últimos años trabajados en vid, frutas, hortalizas o cítricos, reflejado en las vidas laborales de los trabajadores.
"ECONOMÍA SUMERGIDA"
De igual forma, las compensaciones podrían calcularse con otro método que "acabaría con mucho fraude y economía sumergida". Indicó que podría hacerse "sacando el número que dividan el número de toneladas que se elaboran de una producción dividido por el número de trabajadores necesarios para producirla, en función del tipo de producción".
"Más o menos a las explotaciones agrícolas les van a dar compensaciones, pero a los asalariados agroalimentarios no está prevista ninguna, van a tener que gastar el que tenga desempleo su desempleo, y al que no le llamen a trabajar no va a tener ingresos", apostilló Villar, quien no descartó movilizaciones, aunque por el momento el Ministerio "quiere ser sensible" a las peticiones.
Por su parte, el secretario sector agrario, y manipulado hortifrutícola de Fitag-UGT, Miguel Rodríguez, valoró que los trabajadores hayan sido convocados puesto que hasta ahora "habían sido olvidados" y advirtió de que el veto ruso puede acarrear "una pérdida de empleo".
"MÁS PRECARIO"
Rodríguez detalló que el Ministerio se ha comprometido a mantener a los sindicatos informados periódicamente de como evoluciona el veto ruso y su repercusión en el empleo que cada día es "más precario" en el sector.
A pesar de estar "totalmente de acuerdo" con las medidas", los sindicatos consideraron "incompletas" las medidas anunciadas por el momento por la CE.
El Ministerio se ha reunido también este lunes con las organizaciones y cooperativas agrarias, el sector hortofrutícola, los productores cárnicos y de leche, y las comunidades autónomas para estudiar los efectos del veto ruso.
El pasado viernes la Comisión Europea (CE) adoptó el texto sobre la ayuda a los melocotones y nectarinas, por el que destinará 29,7 millones para respaldar la retirada de estas frutas, así como otros tres millones a medidas para su promoción, especialmente en España, Italia, Grecia y Francia, y que provendrán del presupuesto europeo de 2014.
Esta cifra se suma al paquete de medidas de apoyo al sector agrario valorado en 125 millones, anunciado por la CE hace una semana, con el fin de “estabilizar” los precios y compensar los primeros efectos derivados del veto ruso a las importaciones, y que se cargarán previsiblemente en las cuentas de 2015.