La estafa, con la que consiguieron un millón de libras -1,4 millones de euros-, iba dirigida a ancianos y personas vulnerables del sur de Inglaterra. Los detenidos avisaban a las víctimas de un fraude bancario y las persuadían de entregarles dinero para "mantenerlo a salvo", explicó la policía.
"Descubrimos el fraude después de que una investigación sobre terrorismo encontrara pagos sospechosos a una cuenta bancaria de un individuo del que se cree que viajó a Siria", dijo Richard Walton, director de la unidad antiterrorista de la policía.
Los agentes indicaron que un hombre llamado Makzhumi Abukar, que dirigía el fraude desde una dirección del norte de Londres, era el principal cerebro de la trama.
Los arrestados fueron acusados de lavado de dinero o conspiración para cometer un fraude, y están a la espera de su juicio.
La policía no precisó si alguno de los arrestados había viajado a Siria, o si el propietario de la cuenta donde se efectuaron los pagos seguía ahí.
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