Seúl.- Corea del Norte negó hoy que haya organizado un complot para asesinar a Hwang Jang-yop, su desertor de más alto rango que vive refugiado desde hace más de una década en Corea del Sur, informa la agencia surcoreana Yonhap.
La prensa de Seúl publicó el mes pasado que las autoridades surcoreanas habían detenido a dos espías del régimen comunista norcoreano que, haciéndose pasar por refugiados, entraron en Corea del Sur con la intención de matar a Hwang, de 88 años.
La página web norcoreana Uriminzokkiri, citada hoy por Yonhap, indicó que todo es una fabricación del Gobierno de Seúl, "un acto de manipulación", y señaló que "las confrontaciones están siendo cada día más graves" con Corea del Sur, en referencia al reciente aumento de las tensiones.
Según publicó el diario surcoreano "Donga Ilbo" el pasado 21 de abril, dos norcoreanos, oficiales de las fuerzas armadas, entraron en Corea del Sur este año para asesinar a Hwang, que desertó en 1997 a través de la Embajada surcoreana en Pekín.
Hwang es el desertor más eminente del régimen norcoreano, ya que fue secretario del Partido de los Trabajadores de Corea del Norte y presidente de la Asamblea Popular Suprema del país comunista, y desde 1997 ha protagonizado continuas denuncias contra el régimen comunista de Kim Jong-il.
Los espías norcoreanos con la misión de asesinar a Hwang habrían llegado a Tailandia en diciembre pasado vía China con el fin de pasar a Corea del Sur haciéndose pasar por refugiados norcoreanos en busca de asilo, según las autoridades de Seúl.
Los dos consiguieron entrar en Corea del Sur en enero y febrero, aunque las autoridades surcoreanas descubrieron poco después el complot, según la prensa de Seúl.
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