Rajoy habla en catalán a dos días de las cruciales elecciones de la región

  • El jefe del gobierno español Mariano Rajoy y dirigentes de su partido lanzaron este viernes un mensaje en catalán para pedir a los catalanes quedarse en España a dos días de unas elecciones regionales, presentadas como un plebiscito sobre la independencia.

"Perquè units guanyem (porque unidos ganamos)", dice en una muy inusual declaración en catalán Mariano Rajoy al cerrar este vídeo publicado en el último día de la campaña.

"Yo quiero a Cataluña y quiero a los catalanes", asegura también en catalán la vicepresidenta del gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. "Mo me imagino España sin Cataluña", añade la presidenta regional de Madrid, Cristina Cifuentes.

"Muchas cosas nos unen", asegura el ministro del Interior Jorge Fernández Díaz, que hizo gran parte de su trayectoria pública en Cataluña.

El vídeo en blanco y negro de 45 segundos, con una melancólica melodía de piano, supone uno de los pocos gestos conciliadores de los conservadores en esta campaña, marcada por las amenazas sobre las consecuencias negativas de una teórica secesión de Cataluña.

Aunque sólo son unas elecciones regionales, los independentistas consiguieron centrar el sufragio en un plebiscito a favor o en contra de lanzar un proceso de secesión de esta región del noreste de España.

Si obtienen una mayoría de escaños en la cámara regional (68 sobre 135), prometen constituir en 2017 la nueva República Catalana.

El gobierno conservador de Mariano Rajoy se tomó en serio el envite y tanto él como sus ministros hicieron un gran despliegue en la región durante las dos semanas de campaña.

Su estrategia pasó por contrarrestar los optimistas mensajes de los independentistas, entre ellos el presidente regional Artur Mas, que presentan la secesión como la oportunidad de construir un "país más próspero, más justo y más limpio".

En el último momento, apostaron por lanzar un mensaje afectuoso a esta región donde su partido suele conseguir muy pocos apoyos.

Para estos comicios, los sondeos les otorgan un máximo del 10% de los votos, mientras que las dos listas independentistas, la coalición Junts pel Sí (de centroderecha a izquierda alternativa) y la extrema izquierda CUP, podrían superar la mayoría absoluta e incluso rozar el 50% de los votos.

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