Romano Prodi viaja a Argelia para abordar la crisis de Mali

Argel, 8 nov.- El enviado especial de la ONU para el Sahel, el italiano Romani Prodi, llegó hoy a Argelia para tratar con las autoridades la situación en Mali, mientras los países de África Occidental ultiman un plan para una posible intervención militar.

Prodi se entrevistó con el jefe de la diplomacia argelina, Murad Medelci y con el ministro encargado de Asuntos Magrebíes y Africanos, Abdelkader Mesahel, con quienes abordó "en detalle" la situación en el Sahel y en Mali, en particular, según la agencia oficial APS, que no ofreció detalles.

Prodi fue designado el pasado 9 de octubre para coordinar los esfuerzos de la ONU dirigidos a la búsqueda de una estrategia global para la región del Sahel, que se extiende desde Mauritania hasta el Cuerno de África.

La visita del responsable de la ONU se produce dos días antes de que los jefes de Estado de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) se reúnan en Abuya para acordar un plan de intervención que deben entregar al Consejo de Seguridad de la ONU antes del 26 de noviembre.

La CEDEAO planteó, en un principio, la posibilidad de enviar una fuerza de 3.000 hombres, aunque este número podría verse superado.

Asimismo, la visita de Prodi se produce dos días antes de que la jefa de la diplomacia europea, Catherin Ashton, tratara también en Argel la crisis en Mali, cuyo norte está controlado desde junio por grupos radicales islámicos.

Una cuestión sobre la que también discutió la secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, que buscó el apoyó de Argelia a una eventual intervención durante una breve visita a Argel, llevada a cabo hace dos semanas.

Mientras continúan las preparaciones de un plan de intervención, el principal grupo armado del norte de Mali Ansar al Din anunció el martes su disposición a dialogar con las autoridades malienses.

Oficialmente Argelia se ha distanciado de una posible intervención militar, aunque se ha mostrado a favor de operaciones contra los grupos terroristas que operan en las provincias septentrionales malienses de Gao, Kidal y Tombuctú, fronterizas con Argelia.

Sin embargo, no ha especificado cuál sería su participación ni la escala de estas operaciones antiterroristas.