Romeva, Forcadell y Casals encabezarán la lista unitaria para el 27-S

El exeurodiputado de ICV, Raül Romeva, la expresidenta de la ANC, Carme Forcadell y la actual dirigente de Òmnium, Muriel Casals, serán los cabezas de la lista unitaria configurada por CDC y ERC para concurrir a las próximas elecciones del 27-S. En concreto, Romeva irá en primer lugar, seguido de las dirigentes soberanistas. En el baile de nombres que se barajaba en las últimas horas figuraba también el del comisionado per a la Transició Nacional, Carles Viver Pi-Sunyer, finalmente descartado.

Pese a que la lista está, tal y como se acordó, encabezada por independientes, el candidato a la Generalitat será el actual president, Artur Mas. El líder de CDC irá en el número cuatro y Oriol Junqueras, presidente de ERC, en el quinto. El president ha convocado esta mañana en el Palau de la Generalitat tanto a Junqueras como a las tres personas que encabezarán la lista y todos han rubricado la propuesta. El dirigente republicano había insistido especialmente en que la candidatura estuviese encabezada por Romeva, con quien mantiene una relación muy estrecha.

Ya en la tarde de ayer, ambos líderes mantuvieron un encuentro con los representantes de las plataformas civiles soberanistas para trasladarles el principio de acuerdo alcanzado en la tarde noche del lunes. En la lista pactada por CDC y ERC no figuran las CUP, que han rechazado tomar parte al no ajustarse a su petición de que no hubiese presencia de políticos.

Las plataformas civiles soberanistas se han mostrado optimistas con el acuerdo firmado, convencidas de que servirá para ganar el 27-S y "empezar a construir el futuro de un Estado independiente", según apuntó Casals, al término de la reunión. Los detalles concretos, avalados ya por las ejecutivas de partidos y organizaciones, han ido trascendiendo a cuentagotas y se espera que hoy se haga público. Si bien este extremo no ha sido confirmado y algunas fuentes sugieren que podría aplazarse a falta de cerrar varios flecos aún pendientes.Reparto a favor de Mas

Según este principio de acuerdo, CDC y ERC se repartirían sus candidatos al 60% y el 40% respectivamente, un reparto que se trasladaría a una eventual composición del Govern.

Ambos partidos contemplan además ceder varios puestos a Moviment d'Esquerres (MES) y Democràtes per Catalunya (DC), en caso de que las escisiones soberanistas de PSC y UDC se sumen al preacuerdo. ERC se encargaría de incluir a MES y CDC a Demòcrates, dentro de su cuota.

El acuerdo contempla además intensificar los pasos de la "hoja de ruta" independentista, una cuestión que urge a ERC. El partido de Junqueras desea clarificar en qué momento se puede producir una declaración unilateral de independencia si el 27 de septiembre se logra una mayoría en el Parlament, que se produciría, según ha trascendido, en seis meses.

Otro de los puntos de la negociación entre CDC y ERC ha sido el lugar que ocuparán ambos líderes en la lista: Mas, el cuarto y Junqueras, el quinto.Las posiciones han sido negociadas de forma bilateral, y ahora el resto de partes negociadoras tiene que decidir si lo avalan.

Los número seis y siete de la lista también serían independientes, y a partir del octavo serían miembros de CDC y ERC, siguiendo el reparto acordado.
Sin presencia de las CUP

En la lista no presencia las CUP. La candidatura independentista consumó ayer su 'divorcio' de la línea de Mas y Junqueras y trasladó que presentará su propia lista alternativa. "Nos presentaremos con el nombre de CUP-Crida Constituent", subrayó en la tarde de ayer su portavoz, David Fernàndez, quien afirmó en rueda de prensa que la última propuesta "imposibilitaba cualquier punto de acuerdo".

"Fuimos a la reunión de trabajo dispuestos a estudiar y aceptar únicamente la hipótesis avalada por ERC, Òmnium y ANC en la que se planteaba una lista sin partidos. Pero nos encontramos un tablero cambiado donde la idea inicial se descartó rápidamente", explicó Fernández. "No seremos muleta de nadie", apostilló por su parte Xavi Generó, miembro del secretariado nacional de la Candidatura d'Unitat Popular.

La CUP expresó su negativa a una lista unitaria con políticos y defendía una candidatura integrada únicamente por representantes de las entidades y sin presencia de políticos en activo, algo que defendía hasta hace días Òmnium Cultural y ERC.

Por su parte, el portavoz de UDC en el Parlament, Roger Montañola, ha pedido a CDC y ERC, "prudencia" a la hora de querer acordar cuotas de gobierno antes de que se hayan celebrado las elecciones del 27S.

En rueda de prensa en el Parlament, ha resaltado que respetan que CDC haya cambiado su coalición con UDC por otra con ERC pero les ha pedido prudencia: "Si quieren hablar de gobiernos ha de haber elecciones y deben confeccionarse mayorías". Montañola ha mostrado perplejidad por que se coloque en una misma lista a personas tan distantes ideológicamente como, por ejemplo, Joan Tardà de ERC y Antoni Fernández Teixidó de CDC, el primero de la órbita comunista y el segundo liberal, ha dicho, porque "son absolutamente irreconciliables a la hora de hacer un gobierno".Seis meses para la independencia

El acuerdo entre CDC y ERC para ir juntos a la elecciones del 27 de septiembre incluye un paquete de medidas para declarar la independencia de Catalunya en un período que iría de los seisa los ochomeses, según fuentes de la negociación.

"Por primera vez se recoge todo el camino jurídico hacia la independencia", explican la mismas fuentes, que dicen que el pacto recoge los decretos y los pasos jurídicos para avanzar hacia la secesión pese que el Estado se oponga frontalmente, como esperan ambos partidos. Se habla de estos entre seis y ocho meses porque es cuando los dos partidos calculan que habrán dado los pasos hacia la independencia suficientes para que la situación con el Tribunal Constitucional y la Agencia Tributaria sea insostenible.

Si ganan las elecciones y tienen mayoría suficiente para legislar, CDC y ERC apuestan por una "ley de transitoriedad jurídica" que supliría el marco legal español: las leyes del Estado seguirían vigentes a medida que se irían cambiando por leyes catalanas. Con esta ley de transitoriedad se trata, según los negociadores, de dar "fundamento de derecho" a las decisiones que vaya tomando el gobierno catalán y el Parlament pese que a tengan la oposición frontal del Estado y no tengan cabida en la legalidad española.

Ante la imposibilidad de celebrar un referéndum soberanista pactado, CDC y ERC consideran que esta es la vía más plausible para preparar la "desconexión con España" pese a tener, previsiblemente, todas las instituciones del Estado en contra.

A finales de marzo CDC, ERC y las entidades soberanistas pactaron una hoja de ruta para declarar la independencia en 18 meses si después del 27 de septiembre había una mayoría soberanista en el Parlament. Ahora CDC y ERC han decidido acelerar los plazos: presentarse juntas lo facilita ya que el programa del 27S es conjunto, y temen que esperar 18 meses haga morir el proceso soberanista de "inanición".