La fiscalía anunció que "después de haber examinado los documentos recibidos" había decidido "declarar indeseables las actividades" de USRF en el territorio de la Federación de Rusia.
Las actividades de esta organización, asentada en Rusia desde 2009, "constituyen una amenaza para los cimientos del sistema constitucional ruso y la seguridad del Estado", precisa este comunicado que acusa a la USRF de "participar en el proceso político" financiando oenegés rusas.
Ahora tiene que pronunciarse el ministerio de Justicia ruso.
La USRF, cuyo objetivo declarado es desarrollar el sector privado en Rusia, no ha hecho comentarios sobre la prohibición, pero el embajador estadounidense en Moscú, John Tefft, habló de "un paso más hacia el aislamiento del pueblo ruso del mundo".
Una ley firmada en mayo pasado por el presidente ruso, Vladimir Putin, permite declarar "indeseables" a organizaciones extranjeras, que luego pueden ser prohibidas.
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