Sahara. Pp y llamazares reprochan a jiménez su silencio sobre el sahara al defender el presupuesto de exteriores


Los portavoces del PP y de Izquierda Unida reprocharon hoy a la ministra de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Trinidad Jiménez, su silencio sobre el Sahara al defender desde la tribuna del Congreso de los Diputados los presupuestos de su departamento para el próximo año.
La ministra defendió esas partidas pero ni mencionó la situación del Sahara tras el asalto de Marruecos al campamento "de la dignidad" y los posteriores incidentes registrados en El Aaiún.
Nada más subir a la tribuna en su turno de intervención, el portavoz de IU, Gaspar Llamazares, denunció ese silencio y lo consideró una muestra de que no sólo existe una crisis económica sino también de la política, "y profundísima", aseveró.
Lo que era un "contencioso", advirtió, se ha convertido en una "crisis" y puede acabar en un "conflicto".
Llamazares se refirió a la situación del Sahara como "el agujero negro" del Gobierno, al que acusó de utilizar al pueblo saharaui como "moneda de cambio" en las relaciones con Marruecos.
También Francesc Ricomà, del PP, consideró "obligada" la referencia al Sahara para reiterar al Gobierno que debe "recuperar la posición tradicional española, la neutralidad activa".
En su opinión, el Gobierno lleva tiempo "dando palos de ciego con el decepcionante resultado de haber enfadado a todos los actores".
Para el PP, lo sucedido en los últimos días certifica el comportamiento "bochornoso" del Gobierno y su "incapacidad para estar a la altura de sus responsabilidades".
Una de las partes, Marruecos, dijo Ricomà, se ha saltado las reglas de juego en su "hostigamiento, persecución y vacío informativo" sobre el Sahara, y España "no ha movido un dedo" para frenar esa actuación, condenarla e "invitar a reconducir la situación".
Denunció, por ello, la "diplomacia del avestruz" practicada por el Gobierno, caracterizada por un "mutismo" al que identificó abiertamente con "debilidad".
También Uxue Barkos, de Nafarroa Bai, comenzó su intervención expresando su solidaridad con el pueblo saharaui y su "condena absoluta" a la represión ejercida por Marruecos.
Los portavoces de CiU, Josep Sánchez Llibre, que se centró en los Presupuestos de Exteriores, y el socialista Jordi Pedret, no hicieron referencia a estas cuestiones.

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