Sistema político ha privilegiado a pocos en Honduras, según Iglesia católica

Tegucigalpa, 20 nov.- El secretario ejecutivo de la Pastoral Cáritas de la Iglesia católica de Honduras, Germán Cálix, dijo hoy a Efe que los últimos 32 años de democracia en el país no han servido para mejorar las condiciones de vida de la mayoría, sino para privilegiar a unos pocos.

"Estos 32 años no han servido para que el país avance, sino para que unos pocos estén en situaciones privilegiadas y una gran mayoría de la población viviendo en condiciones realmente lamentables", subrayó el religioso.

En su opinión, lo que se ha impuesto en el país centroamericano, de 8,5 millones de habitantes, es una "inequidad sobre inequidad, de tal manera que cada día los cinturones de pobreza y de miseria son mucho más grandes".

Según diversas fuentes, el 70 por ciento de los hondureños es pobre y muchos de ellos pasaron a esa condición desde los años 90 del siglo pasado.

Honduras retornó a la democracia en 1980, tras casi dos décadas de regímenes militares.

Sobre los comicios generales del próximo domingo, en las que por primera vez participarán nueve partidos políticos, Cálix expresó que "el pueblo y los partidos políticos tienen como tarea hacer de las elecciones un espacio de legitimidad para el próximo Gobierno".

"Si las elecciones no logran el grado de legitimidad que el pueblo espera, entonces tendremos un país ingobernable", advirtió el secretario ejecutivo de Cáritas.

Añadió que un Gobierno con poca popularidad puede significar que tenga "escasas posibilidades para conducir el país hacia un estadio de un desarrollo sostenible como todo el mundo lo quiere".

En ese sentido, Cálix resaltó la importancia que tiene para el país que el pueblo salga a votar el próximo domingo.

Cuatro de los nueve partidos que participan en los comicios surgieron tras el golpe de Estado del 28 de junio de 2009 al entonces presidente, Manuel Zelaya, en cuyo Gobierno de cuatro años que fue interrumpido a siete meses de concluir, también aumentó la pobreza, según analistas locales, aunque él lo niega.

"Los retos para el país con una sociedad que no logre estabilizarse con las elecciones, junto a la crisis económica, la fractura social y la gobernabilidad que es inestable en este momento, son demasiado grandes para los que están aspirando a la presidencia, enfatizó el religioso hondureño.

Añadió que los políticos, más que en ganar las elecciones, "deberían estar pensando en el futuro del país, que tendrá que construirse en base a un consenso con todos los sectores".

Cálix dijo que las nuevas autoridades que asuman el 27 de enero de 2014 deberán adoptar "decisiones acertadas para que el país no se hunda con la situación crítica que en este momento estamos viviendo".