Sonsoles respira tranquila: su familia ya está a salvo

  • La mujer del presidente del Gobierno y sus dos hijas, Laura y Alba, han sido tres razones que han pesado mucho en la decisión de Zapatero de marcharse. La familia temía que podían ser objeto de más polémicas y rumores.
Sonsoles Espinosa.
Sonsoles Espinosa.
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Beatriz Toribio

"No voy a ser candidato en las próximas elecciones generales". Este anuncio que realizaba esta mañana el presidente dejó boquiabierta a media España. Salvo a una persona: Sonsoles Espinosa, su mujer. Ella la había oído muchas veces. Era una promesa que le había hecho su marido, pero no acababa de cumplirse.

Si alguien sonrió, brindó o celebró este anuncio fue la que es su eposa desde enero de 1990, que fue cuando se casaron después de varios años de noviazgo. Una mujer que, como cuentan fuentes cercanas a Zapatero, nunca se ha acabado de adaptar a Madrid y siempre ha soñado con volver a León.

"La familia pesará mucho en la decisión que tome el presidente" contaban quienes le conocen en pleno debate sucesorio. Y así él mismo lo reconocía en su discurso ante el Comité Federal: creo que mi marcha es lo "más razonable" y "conveniente" para el país, para su partido y "para mi familia", vino a decir en su discurso.

Sonsoles, Laura y Alba. Son las tres mujeres más importantes de la vida de José Luis Rodríguez Zapatero. Tres mujeres que le han pesado mucho a la hora de decidir la salida del Palacio de La Moncloa. Un edificio que Zapatero consideraba su casa mientras que su mujer y sus hijas no acababan de verla más que como una residencia temporal.

Fuentes cercanas a Zapatero aseguran que Sonsoles y Zapatero –pero sobre todo Sonsoles- consideran que sus hijas estaban sufriendo serios ataques por parte de la opinión pública y publicada. Y temían que a partir de que Laura, la mayor, cumpliera 18 años la situación podía empeorar aún más.

El último de estos ataques fueron las informaciones publicadas sobre el supuesto noviazgo de Laura Rodríguez Espinosa con un estudiante marroquí, hijo de un ex dirigente del Istiqlal, partido nacionalista muy próximo al rey Mohamed VI. Fue la comidilla de varios programas de televisión, como 'Sálvame' y de medios como El Mundo. La Moncloa lo desmintió.

La hija mayor del presidente volvía a estar en el disparadero de los medios de comunicación y de la opinión pública por segunda vez. La primera y más polémica fue en septiembre de 2009, cuando una foto de la familia Zapatero-Espinosa con la familia Obama dio la vuelta a medio mundo.

Laura y Alba, por aquel entonces menores de edad, aparecían con atuendo oscuro estilo 'gótico'.A partir de entonces se generó una gran curiosidad en la internet sobre éstas y otras imágenes de las hijas del presidente Zapatero. Las redes sociales ardían en comentarios y las bromas, vídeos e imágenes manipuladas sobre las dos jóvenes llenaban los correos electrónicos.

Sonsoles no podía más. No quería que sus hijas fueran siendo objeto de estas y otras polémicas. Quería volver a su vida tranquila anterior. A su León querido. De hecho, quienes conocen a la familia Zapatero-Espinosa destacan que la pareja vendió la casa que tenía en Las Rozas. Lo que para ellos es una prueba evidente de que el futuro a medio largo-plazo de esta familia no está en Madrid. Solo queda aguantar menos de un año. Después ya serán 'libres'.

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