Tailandia aumenta seguridad en el sur por el décimo aniversario de masacre

  • Las autoridades tailandesa indicaron que se encuentran hoy en alerta roja por posibles atentados en las provincias meridionales del país con motivo del décimo aniversario de la masacre de Tak Bai, donde murieron 85 personas durante una serie de altercados con la Policía y el Ejército.

Bangkok, 25 oct.- Las autoridades tailandesa indicaron que se encuentran hoy en alerta roja por posibles atentados en las provincias meridionales del país con motivo del décimo aniversario de la masacre de Tak Bai, donde murieron 85 personas durante una serie de altercados con la Policía y el Ejército.

El Comando de Operaciones de Seguridad Interna emitió un comunicado en el que instó a todas las unidades desplegadas en las provincias de Narathiwat, Pattani, Songhla y Yala, a estar en alerta máxima frente a posibles ataques por parte del bando insurgente musulmán, según el diario "Bangkok Post".

Las autoridades informaron de que recientemente han sido robados nueve vehículos que podrían ser utilizados por los terroristas para atentar durante esta semana.

El 25 de octubre de 2004, la Policía disolvió violentamente una manifestación en Tak Bai, en la provincia de Narathiwat.

Siete personas murieron por disparos de las fuerzas de seguridad durante el intento de dispersar a unas 1.300 personas que se habían reunido frente a la comisaría local para exigir la liberación de seis voluntario del cuerpo de defensa local.

Otras 78 perecieron asfixiadas o aplastadas en el interior de camionetas de la Policía mientras eran trasladadas a un centro de detención militar a unos 200 kilómetros de lugar del arresto y más de cinco horas de viaje.

Varios vehículos militares han sido desplegados a lo largo de los 13 distritos de Narathiwat, incluido Tak Bai, el epicentro de la tragedia, señaló la Policía.

Según datos del servicio de inteligencia tailandés, la provincia de Yala, la región más sureña de Tailandia, podría ser uno de los objetivos de los insurgentes cuyo ataque sería una declaración "simbólica" contra las autoridades locales.

La matanza de Tak Bai ocurrió nueve meses después de que la insurgencia musulmana del sur del país retomara la lucha armada que ha causado cerca de 6.200 muertos desde enero del 2004 hasta agosto del 2014, el 90 % civiles, y más de 11.240 heridos, según datos de la organización Deep South Watch.

La organización pro derechos humanos, Human Rights Watch, reclamó al Gobierno de Tailandia este sábado que lleve ante la justicia a los policías y militares responsables de las muertes

"El fracaso de Tailandia para juzgar al personal de seguridad responsable por las muertes en Tak Bai es una flagrante injusticia que desacredita a los cuerpos de policía, militares y a los tribunales de justicia", señaló Brad Adams, director para Asia de HRW, en un comunicado.

Los atentados con armas ligeras, asesinatos y atentados con explosivos en Pattani, Narathiwat y Yala se repiten casi a diario a pesar del despliegue de unos 40.000 efectivos de las fuerzas de seguridad y la declaración del estado de excepción desde julio de 2005.

Los insurgentes denuncian la discriminación que sufren por parte de la mayoría budista del país y exigen la creación de un Estado islámico que integre estas tres provincias, que configuraron el antiguo sultanato de Pattani, anexionado por Tailandia hace un siglo.

"Lo que sucedió hace 10 años en Tak Bai no debe ser olvidado (..) Hacer justicia con las víctimas de la masacre es un paso importante para terminar con las atrocidades y respetar los derechos de la comunidad musulmana del sur (de Tailandia)", sentencia el director para Asia de HRW.

Mostrar comentarios