Toni Cantó pide la "dimisión en bloque" de toda la dirección de UPyD

    • El diputado insta a asumir responsabilidades tras la debacle de las elecciones andaluzas.
    • El Consejo Político vota hoy la opción de retrasar cualquier debate 'de organización' hasta después de los comicios de mayo.
Cantó, con Rosa Díez, en el Congreso (archivo)
Cantó, con Rosa Díez, en el Congreso (archivo)

El Consejo Político que este sábado celebra UPyD se avanza como el más difícil para Rosa Díez. Sobre la dirigente de la formación magenta han arreciado las críticas tras el batacazo de las votaciones en Andalucía, que no dieron ningún escaño al partido.

El sector crítico ha insistido estos días en la necesaria marcha de Díez para tratar de revitalizar el partido, y así lo ha reiterado hoy una de sus principales 'cabezas' visibles, el diputado Toni Cantó. El dirigente no ha desaprovechado ni un minuto a su llegada a esta cita para pedir la "dimisión en bloque" de toda la dirección de UPyD, al considerar que debe asumir "responsabilidades" tras el fracaso andaluz.

Cantó ha advertido de que solicitará "que los afiliados hablen" ante esta situación de crisis interna que está viviendo UPyD, después de que el pasado lunes dimitieran dos de sus diputados en el Congreso, Irene Lozano y Álvaro Anchuelo.

El futuro de la portavoz de UPyD, Rosa Díez, dependerá en gran parte de lo que hoy salga del Consejo Político, convocado para replantear la estrategia de cara a las próximas citas electorales. En el orden del día, no obstante, no figura que se debata la moción de censura planteada por un militante de Salamanca, Miguel Ángel Quintana, y que ha sido respaldada por varias federaciones. La razón está en los propios estatutos de la formación 'magenta', que obligan a que ese debate sea notificado con mayor antelación y en una sesión convocada a tal efecto. Pese a que cualquier miembro del Consejo Político podría introducir asuntos de interés en ese orden, no se permite tampoco que esos asuntos puedan interferir en "cuestiones de organización y régimen de funcionamiento del partido", como sería el caso.

Quintana solicitó el pasado martes a la secretaría de Organización la inclusión de esa moción de censura "ante la urgencia de los acontecimientos recientes", opción que fue rechazada por la dirección aludiendo a estos estatutos. Sin embargo, no hay duda de que la situación de Díez planea de forma inevitable en la cita de hoy."Autonomía" ante otros partidos

Desoyendo las críticas, el equipo de dirección presentará hoy una resolución que desafía los resultados andaluces-el partido no obtuvo ningún escaño y apenas un 1'9% de los votos-y defiende que el partido "sigue siendo indispensable para conseguir una democracia de calidad sin corrupción, transparente y con justicia independiente".

"Solicitamos el apoyo del Consejo Político para llevar a las instituciones nuestros objetivos y propuestas en las próximas elecciones de mayo de 2015 manteniendo la autonomía política de UPyD respecto a cualquier otro partido, coalición u operación política", se lee en el escrito.

Esa "autonomía" lleva implícita la posibilidad de una futura unión con Ciudadanos, a la que se opone Díez y a la que numerosos dirigentes ven ahora como única tabla de salvación. El partido que encabeza Albert Rivera, en pleno auge en los sondeos-logró nueve escaños en Andalucía-supera hoy ampliamente a UPyD en opciones electorales. Sin embargo, el equipo de Díez intenta aplazar el debate al máximo. Si bien el texto hace propósito de enmienda, invitando a plantear "todos los cambios que se crean necesarios para mejorar nuestra acción política y el funcionamiento interno se debatan y aprueben en una conferencia política", es previsible que esa conferencia no se celebre hasta después de las citas de mayo.

La misma situación se dio ya el pasado septiembre, tras la crisis abierta por el entonces portavoz del partido en el Parlamento Europeo, Francisco Sosa Wagner, que acusó a la dirección de autoritaria e instó a negociar con el partido de Rivera. La resolución votada entonces determinó que cualquier pacto debería respetar el modelo de organización y los principios de UPyD. Tras varias conversaciones, las negociaciones terminaron en fracaso.

Pese a esos intentos de Díez y sus cada vez menores apoyos para blindarse ante los próximos meses, no hay duda de que el Consejo será también un plebiscito sobre sus opciones. Aunque la resolución se apruebe, y el debate ni siquiera se plantee, son muchos ya los que entienden que la dirigente ha quedado desautorizada y que su marcha es solo cuestión de tiempo. Si pierde la votación-opción que no parece probable-el partido quedará en manos de una gestora hasta el próximo congreso.

Los dirigentes críticos habían expresado ya ayer su ilusión porque el Consejo de este sábado represente también "el primer día del nuevo rumbo" para el partido.

"Estoy escribiendo mi discurso para el consejo político. Ilusionado al fin... Mañana será el primer día del nuevo rumbo de UPyD", publicó ayer Cantó en su cuenta de Twitter.

También la diputada Irene Lozano tiene esperanzas en esta cita. No obstante, ella no forma parte del Consejo Político, después de que el lunes abandonase el Consejo de Dirección. "Estoy en UPyD, no lo dudéis. Peleando por un nuevo comienzo", ha dicho, rechazando cualquier posibilidad de dimisión.

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