Tranquilidad y "blindaje" policial en Sol para la toma de posesión de Aguirre

Madrid.- Más de una quincena de furgones policiales "blindan" desde esta mañana la Puerta del Sol para evitar incidentes durante la toma de posesión de Esperanza Aguirre en el edificio de la Presidencia de la Comunidad, aunque la tranquilidad es la tónica general y apenas hay unas decenas de curiosos en el kilómetro cero.

Ante la posibilidad de que se repitieran episodios de protestas como los registrados el pasado sábado en la constitución de muchos ayuntamientos, o los que se han producido en los alrededores del Parlamento de Cataluña estos dos últimos días, la Policía Nacional ha instalado un fuerte dispositivo policial para garantizar el acceso al edificio de la Presidencia.

No obstante, no se ha registrado ningún incidente y no hay presencia de manifestantes en el kilómetro cero, más allá de unos cuantos curiosos que esperaban la llegada de la presidenta regional, que tomará posesión de su cargo a las once de la mañana.

Aguirre ha llegado pronto al edificio de la Presidencia de la Comunidad, y poco a poco lo han ido haciendo también los invitados, entre ellos el presidente del PP, Mariano Rajoy, que ha accedido -como todos los demás- por la puerta principal sin que se registraran protestas o incidentes.

La Policía ha colocado una docena de furgones a lo largo de toda la fachada principal del edificio, dejando hueco únicamente para el escaso tráfico de taxis y vehículos de carga, y para la llegada de los invitados.

Ha situado también furgones en los accesos a la Puerta del Sol desde las calles Arenal, Mayor, Preciados, Alcalá o Carrera de San Jerónimo, entre otras.

Pese a la previsión de que pudiera haber algún incidente, no se ha registrado ninguno, y sólo unas pocas decenas de curiosos intentaban mirar la llegada de los invitados a Sol entre furgón y furgón policial.

Algunos de ellos protestaban a la Policía por impedirles acercarse más al edificio de la Presidencia, y se quejaban de que a ellos les pidieran marcharse pero no a los acampados del Movimiento 15-M, que todavía duermen en Sol.

Y los acampados, mientras tanto, continúan con sus labores diarias de información a los ciudadanos o durmiendo en sus tiendas de campaña, ajenos a la toma de posesión de Aguirre.