Treviño, el enclave que lleva más de tres siglos buscando su identidad

  • El enclave burgalés de Treviño, 222 kilómetros cuadrados ubicados en el corazón geográfico de Álava, lleva más de tres siglos buscando su identidad para superar esa dicotomía de depender políticamente de una administración y en la vida real de otra.

Vitoria, 5 feb.- El enclave burgalés de Treviño, 222 kilómetros cuadrados ubicados en el corazón geográfico de Álava, lleva más de tres siglos buscando su identidad para superar esa dicotomía de depender políticamente de una administración y en la vida real de otra.

La mayoría de sus cerca de 2.000 habitantes se han mostrado partidarios en varias ocasiones de segregarse de Burgos y Castilla y León, y de anexionarse a Álava y Euskadi, donde muchos de ellos hacen su vida cotidiana.

Por ello, los alcaldes de los dos municipios del enclave, ambos independientes, recalcan que no se trata de una aventura soberanista, sino de buscar una solución a lo que ellos consideran que es un abandono por parte de la administración castellano-leonesa.

Todo este embrollo vital en el que viven los treviñeses va a tener un nuevo capítulo mañana. El Parlamento Vasco aprobará una iniciativa para llevar por primera vez a las Cortes Generales el debate sobre la anexión y así poder saltarse el veto que históricamente ha puesto el Parlamento y la Junta de Castilla y León.

La petición que se enviará al Congreso es que apruebe una ley orgánica que modifique los límites territoriales de Álava y Burgos, con lo que no requeriría del visto bueno de Castilla y León, aunque es probable que el PP, con mayoría absoluta vuelva a "archivar" este asunto

Fundado en 1160, Treviño, con una extensión de 222 kilómetros cuadrados, está situado a 17 kilómetros de Vitoria y a unos 100 kilómetros de Burgos. En los dos municipios viven unas 2.000 personas.

El comienzo de sus aspiraciones segregacionistas se remonta a 1646 y tras la restauración de la democracia la cuestión de este enclave se ha planteado de nuevo en 1980 y en 1998, dos intentos que no prosperaron por la oposición de Castilla y León.

La dualidad en la vida de los treviñeses se muestra en muchos aspectos, como, por ejemplo, que la gran mayoría de los niños del enclave están escolarizados desde pequeños en centros vascos, en Vitoria o en Nanclares de la Oca, con el objetivo de que cuando cursen la educación secundaria y posterior el desconocimiento del euskera no sea un problema para ellos.

Por ejemplo, en el centro de educación infantil y primaria de Treviño hay matriculados algo más de sesenta niños, cuando es una infraestructura diseñada para más de trescientos.

También en el cuidado de la salud, el enclave vive una especie de "doble personalidad". En el centro de atención primaria de Treviño, el dispensario más importante del enclave, hoy una mujer de mediana edad recibía el volante de su médico para recibir atención especializada en el Hospital Universitario de Álava.

Los habitantes del enclave, gracias a un convenio entre las comunidades de Castilla y León y Euskadi, pueden elegir si se someten a intervenciones médicas de entidad en Vitoria o, por ejemplo, en Miranda de Ebro (Burgos).

Jose, que regenta la tienda de alimentación de Treviño, explica que muchos vecinos, como él, quieren la anexión a Álava, no por cuestiones políticas sino por el "bienestar de la gente".

Lamenta que por las disputas políticas, las administraciones no invierten en la zona todo lo que deberían, como en infraestructuras, aunque reconoce que es un tema que no provoca discusiones entre los partidarios y los detractores de la desanexión. "Vivimos en paz".

En La Puebla de Arganzón, Enrique, un anciano de 83 años, es reacio a hablar de este tema político. "Yo vivo bien como estoy", dice el jubilado que ironiza con el nuevo episodio político sobre el futuro administrativo del enclave al recordar: "Desde que tengo catorce años ya se está votando para juntarnos a Álava".

Este hombre dice que la mayoría de las personas mayores del enclave lo que quieren es que los que "mandan" en Castilla y León y en Vitoria se pongan de acuerdo y que este debate lo han fomentado los jóvenes que se han asentado allí procedentes de Vitoria.

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