Madrid, 11 jun.- El secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, ha cifrado hoy en unos 1.400 convenios (para 2,2 millones de trabajadores) los que todavía no se han renovado y que están en peligro de quedar sin efecto a partir del próximo 8 de julio.
Ferrer ha dado este dato en un encuentro informativo para presentar el Anuario de relaciones laborales 2013.
La reforma laboral establece que, a partir del próximo 8 de julio, los convenios que hayan sido denunciados y no se hayan podido renovar tras un año de negociación decaerán.
Esto supone que, si esos convenios se quedaran sin efecto, los trabajadores a los que regulan sus condiciones laborales pasarían a depender de convenios de rango superior (estatal o sectorial) o bien del Estatuto de los Trabajadores.
Ferrer ha recordado que el año comenzó con unos 1.800 convenios bloqueados (de 3,5 millones de trabajadores).
Ahora se han reducido por el trabajo realizado en la última semana, ha indicado, al tiempo que ha recordado que la patronal CEOE decía de las primeras cifras que eran "ridículas".
El coordinador del Anuario laboral, el catedrático Santos Ruesga, ha destacado que, en los diferentes artículos que se recogen, subyace el análisis del "error de unas políticas" que van en contra de la mayoría de la población, porque priorizan los recortes y la reducción del déficit.
En su opinión, con ellas no se están logrando los objetivos de creación de empleo y de generar actividad, a pesar de lo que aventuraron "profetas" como la ministra de Empleo, Fátima Báñez, y el titular de Economía, Luis de Guindos.
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