UGT y APM apoyan a un periodista de la Ser condenado que protegió sus fuentes

  • El sindicato UGT y la Asociación de la Prensa de Madrid han apoyado hoy públicamente a un periodista de la Cadena Ser, Pedro Jiménez, condenado por calumnias por un juzgado de Madrid a pesar de que, según la emisora, varios testigos corroboraron sus informaciones mientras él protegía a sus fuentes.

Madrid, 10 nov.- El sindicato UGT y la Asociación de la Prensa de Madrid han apoyado hoy públicamente a un periodista de la Cadena Ser, Pedro Jiménez, condenado por calumnias por un juzgado de Madrid a pesar de que, según la emisora, varios testigos corroboraron sus informaciones mientras él protegía a sus fuentes.

"Sorpresa y protesta por una sentencia desmedida que va contra el ejercicio del periodismo" ha sido la frase usada por la APM para oponerse al fallo del Jugado de lo Penal nº 15 de Madrid, mientras que UGT "defiende la protección de la fuente informativa como un derecho fundamental del periodismo".

La Cadena Ser informa en su web de que "esta emisora publicó en marzo del 2007 que la oficina antifraude de la Unión Europea" estaba investigando a la ONG, CIPIE.

"Se trababa de saber si el dinero público recibido para desarrollar proyectos de cooperación en países del Tercer Mundo estaba llegando a su destino y se estaban realizando los proyectos comprometidos", añade la Ser.

Después de varios años, "la oficina contra el fraude de Bruselas ha recomendado a las autoridades que pidan a la ONG la devolución de parte de esos fondos".

Sin embargo, la sentencia condena al periodista, que desveló el caso y que no ha querido hacer responsables de la información a sus fuentes revelando su identidad, por un delito de calumnias.

La emisora recuerda que en el juicio varios testigos corroboraron que las informaciones de Jiménez habían sido contrastadas y eran veraces, algo demostrado porque la Unión Europea había exigido a esta ONG la devolución de parte de los fondos cobrados.

La APM considera que las informaciones publicadas por Jiménez estaban contrastadas y eran verídicas, de modo que no se explica la condena por calumnias, mientras que UGT anima a su empresa, la Cadena Ser, a recurrir.

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