Una ciudadanía apática elige el nuevo Parlamento de Sri Lanka

Nueva Delhi.- Sri Lanka votó hoy para escoger su primer Parlamento de la posguerra en un clima de apatía y con una participación que los observadores situaron alrededor del 50 por ciento.

El presidente de Sri Lanka, Mahinda Rajapaksa, cuyo partido parte como favorito para dominar la Cámara, acudió sonriente a depositar su voto ataviado con una llamativa camisa azul y una falda blanca tradicional del Sur de Asia, flanqueado por unos ayudantes que lo resguardaban de la lluvia.

Pero la ciudadanía acogió con escepticismo la cita electoral, en contraste con la participación oficial de casi el 76 por ciento de los comicios parlamentarios de 2004 y del 74,4 por ciento de las presidenciales de enero, en las que Rajapaksa vio revalidado su mandato.

Consultado por Efe, el portavoz del Centro de Observación de la Violencia Electoral, D.M. Dassanayake, cifró en entre el 45 y el 50 por ciento la participación y dijo que los ceilaneses "no están interesados" en el proceso porque están "cansados de votar" en las sucesivas citas electorales.

Dassanayake, cuya organización ha desplegado a 320 observadores por todo Sri Lanka, explicó que se han registrado al menos dos tiroteos por parte de simpatizantes de distintos partidos en la ciudad costeña de Galle, en el sudoeste de la isla, aunque no se registraron víctimas.

"También sabemos que varios vehículos oficiales han sido utilizados para trasladar votantes en distintos puntos del país, lo que es una violación grave de las leyes electorales. Sabemos que la entidad responsable de ello es el Gobierno", denunció.

Entre diez y doce observadores de la oposición fueron arrestados, según Dassanayake, quien añadió que en la ciudad central de Kandy simpatizantes del Gobierno impidieron a varios ciudadanos ejercer su derecho a voto.

El centro de observación electoral ceilanés PAFFREL, según recogen los medios, ofreció un cálculo de participación similar, al situarla entre un 50 y un 52 por ciento.

El comisario adjunto de la Comisión Electoral. W.P. Sumanasari, dijo al canal de televisión ceilanés "Ada Derana", según su página web, que los datos de participación oficiales tan sólo serán divulgados cuando se anuncien los resultados finales, algo que previsiblemente tendrá lugar mañana.

Los analistas pronostican que la Alianza para la Libertad del Pueblo Unido (UPFA) de Rajapaksa será la más votada y ampliará su mayoría en la Cámara frente al Partido Nacional Unido (UNP), la principal fuerza de la oposición.

"No han sido unas elecciones justas. Mantendremos reuniones para decidir los pasos a dar", dijo el secretario general del UNP, Tissa Attanayaka, a la edición digital del diario ceilanés "Daily Mirror".

El político opositor se hizo eco de los pobres datos de participación, declaró que el pueblo está "harto" de los comicios convocados por el Gobierno y denunció que su partido tiene información de que varios votantes han sido intimidados.

La UPFA tiene actualmente 105 de los 225 escaños del Parlamento, frente a los 82 del UNP.

Éstas son las primeras elecciones legislativas tras la victoria de Rajapaksa en las presidenciales de enero, en las que se impuso al ex jefe del Ejército Sarath Fonseka, quien concurre también a estos comicios pese a estar encarcelado por su presunta implicación en actividades políticas cuando estaba al frente de las Fuerzas Armadas.

Anoche, la oficina de prensa de Fonseka difundió un comunicado en el que llamó a los opositores a "no rendirse" y felicitó a los que han luchado "contra la corrupción, el terrorismo gubernamental y la adulteración de la democracia".

El ex general fue el encargado de comandar a las tropas ceilanesas en su victoria militar sobre la guerrilla tamil (LTTE) en mayo de 2009, tras lo cual se enfrentó a Rajapaksa y fracasó en su intento de arrebatarle el sillón presidencial.

El portal afín a la extinta guerrilla, TamilNet, se jactó del "desinterés" de la población, especialmente la de su etnia, y denunció numerosas irregularidades como las supuestas presiones de un miembro del partido gobernante para que los conductores de autobús no transportaran a votantes tamiles a los colegios electorales.

TamilNet aseguró que tras las primeras cinco horas de votación tan sólo un 10 por ciento de los electores ejercieron su derecho a voto en Jaffna, la capital cultural de los tamiles.

Como ya sucedió en los comicios de enero, ni la UE ni la ONU -institución que ha sido repetidamente criticada por el Gobierno de Rajapaksa- han desplazado observadores para supervisar el desarrollo de los comicios.