Una red vendía desde Castellón coches de alta gama con kilómetraje manipulado

Castellón, 21 sep.- La Policía Nacional ha desmantelado una red y ha detenido a nueve personas por estafar a compradores de coches de segunda mano por Internet, ya que manipulaban el kilometraje de los vehículos haciéndolos pasar por seminuevos, cuando llegaban a tener 300.000 kilómetros.

Según han informado hoy fuentes de la comisaría provincial, los detenidos son cuatro españoles, de edades comprendidas entre los 35 y 47 años, tres rumanos, de 29, 30 y 32 años de edad, y un colombiano de 23 años, así como dos mujeres españolas de 34 y 27. A todos ellos se les imputa un delito de estafa y pertenencia a organización criminal.

La investigación se inició al tener conocimiento de que en una carpintería de la travesía Tombatossals había cuatro vehículos de alta gama, todos de color rojo y con la misma placa de matrícula, y que además tenían un kilometraje cercano a los 200.000 kilómetros.

Los agentes averiguaron que un mecánico guardaba allí los vehículos para un concesionario de compra-venta de coches, y que uno de los responsables del concesionario había sido denunciado y detenido en varias ocasiones por alterar el cuentakilómetros de los vehículos que vendía.

Simultáneamente, en diferentes puntos de España se presentaron ocho denuncias en las que se indicaba que una empresa de Castellón dedicada a la compra-venta de vehículos de segunda mano había manipulado los cuentakilómetros de lo vehículos y el año de fabricación para hacerlos pasar por nuevos e incrementar así su precio.

La empresa, que se presentaba como "solvente y de prestigio", colgaba las ofertas de los vehículos en Internet, por lo que las denuncias no sólo procedían de Castellón, sino de otras provincias como Málaga, Navarra, Alicante, Valencia y Madrid.

Según las mismas fuentes, la red adquiría los vehículos con un elevado número de kilómetros, algunos de ellos procedentes de siniestros que eran reparados por sus propios mecánicos, que modificaban el cuentakilómetros para venderlos a un precio mucho mayor al de su valor de mercado.

El concesionario, con actividad delictiva desde el año 2010, se anunciaba en varias páginas web conocidas del sector, con una gran cantidad de anuncios, lo que hacía aumentar el nivel de confianza en la mercantil.

La trama había constituido varias empresas con distinta denominación para llevar a cabo su actividad y eludir la acción de la justicia.

Cuatro de los detenidos cuentan con antecedentes policiales, entre ellos un mecánico, con ocho incidencias, y el jefe de la trama, con catorce detenciones, en su mayoría por estafa y falsedad documental.