UPyD pide la dimisión del presidente de Caja de Ávila por "fracaso" de Bankia

  • Unión, Progreso y Democracia (UPyD) ha pedido hoy la dimisión del presidente de Caja de Ávila, Agustín González, tras el "fracaso" de Bankia, entidad de la que forma parte junto con seis cajas más.

Ávila, 8 may.- Unión, Progreso y Democracia (UPyD) ha pedido hoy la dimisión del presidente de Caja de Ávila, Agustín González, tras el "fracaso" de Bankia, entidad de la que forma parte junto con seis cajas más.

En una nota remitida a los medios, el responsable de Economía de UPyD en Castilla y León, Álvaro Aparicio, ha señalado que si Agustín González considera "natural" el relevo de Rodrigo Rato como presidente de Bankia, la permanencia de González es "antinatural".

De la misma forma, se han preguntado si, tras el recorte de 10.000 millones de euros en Sanidad y Educación, se destinan "entre 7.000 y 10.000 millones" a rescatar Bankia, "quién rescata a los ciudadanos".

Para Álvaro Aparicio, si Agustín González considera "un relevo de lo más natural" la salida de Rodrigo Rato, en UPyD considerarían "aún más normal" y "natural" la "salida de todos los políticos de la entidad financiera, incluyéndole a él".

Al respecto, el responsable económico de UPyD en Castilla y León ha recordado que su formación lleva "advirtiendo" desde hace "más de dos años" sobre la "necesidad" de "despolitizar" los órganos de dirección de las cajas.

En este punto, ha recordado que quienes "hoy critican" lo que ha ocurrido en Bankia "siguen en el Consejo de Administración de la entidad", refiriéndose a los representantes del Partido Popular, del PSOE y de Izquierda Unida, así como a las organizaciones sindicales UGT y CCOO.

Por ello, UPyD ha considerado que si la inyección de fondos públicos a las cajas es "imprescindible", ésta debe implicar la "exigencia" de "responsabilidades" a los "malos gestores".

Igualmente, ha pedido la "devolución", en el futuro, de las ayudas públicas, porque "los ciudadanos no deben pagar con sus impuestos los desmanes de unos y otros al frente de las cajas".

Finalmente, se ha preguntado si los 31.800 millones de euros en activos problemáticos vinculados al ladrillo son "una cifra real" y "actualizada al precio del mercado", porque "el agujero de la entidad podría agrandarse más".

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