Valeriano gómez afirma que la reforma de políticas activas es “la mayor en 25 años”

El ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, afirmó este viernes que la reforma de las políticas activas de empleo es la “más importante de los últimos 25 años” y está concebida “por y para las personas desempleadas”.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Gómez subrayó que este decreto ley constituye “un importante hito” en la política de reformas estructurales del Ejecutivo ya que modifica la ley de empleo que tiene 25 años de antigüedad.
Gómez señaló que el Gobierno ha elaborado esta reforma “desde el diálogo social” y desde la concertación con las comunidades autónomas.
Asimismo, el ministro destacó que se trata de una reforma con un “firme componente estructural” que busca “activar al conjunto de la población”.
La reforma incluye como novedad el derecho de los parados a recibir una atención personalizada, a través de un itinerario individualizado de reinserción laboral.
La elaboración de estos itinerarios priorizarán en 2011 los colectivos de mayores dificultades de reinserción, como los jóvenes, los parados de larga duración y los mayores de 45 años que trabajaban en sectores en crisis, como la construcción. Sin embargo, a partir de 2013 se producirá la “universalización” de los itinerarios.
No obstante, advirtió de que estos itinerarios, que dependerán de las necesidades de cada parado, también suponen una serie de obligaciones que estarán recogidas en un Acuerdo Personal de Empleo.
Así, los parados deberán cumplir con las actividades de formación que establezca dicho acuerdo. En caso contrario, salvo por causas justificadas, será sancionado con una suspensión en la prestación por desempleo.
No obstante, explicó que las sanciones que se apliquen serán las mismas que ya están en vigor, por lo que la reforma aprobada por el Ejecutivo no supone, en esta materia, “ni un endurecimiento ni una relajación”.
La reforma también persigue el fomento de la cultura emprendedora de todo el conjunto de la población, ya que, según el ministro, ésta es “una de las carencias de la economía española”.
La reforma supone la desaparición de los programas de empleo nacionales que serán sustituidos por los que establezca cada una de las comunidades autónomas.
Sin embargo, el Ejecutivo incorpora una serie de mecanismos para garantizar “la igualdad de trato en el conjunto del territorio nacional y el mantenimiento de la unidad de mercado”.
Para ello, se establecerá una estrategia nacional plurianual, que será complementada cada año con un plan de empleo, que fijará una serie de objetivos y orientaciones que deberán cumplir las comunidades autónomas.
También habrá un catálogo de servicios que deberán prestar todos los servicios públicos de empleo.
Además, Gómez afirmó que es “fundamental” reforzar la colaboración entre el sector público y el privado. En este sentido, señaló que los países en los que esta colaboración es más fuerte es donde “mayores avances ha habido”.