Zapatero receta al madridista rubalcaba el barça-arsenal como ayuda a su recuperación


El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, bromeó hoy que la visión del partido de fútbol F.C. Barcelona-Arsenal de esta tarde "ayudará" a la recuperación de su vicepresidente primero, Alfredo Pérez Rubalcaba, mientras que declaró no estar "por la labor" de pronunciarse sobre si España está preparada para tener una presidenta como la ministra de Defensa, Carmen Chacón.
Zapatero respondió así a sendas preguntas sobre Rubalcaba y Chacón que se le formularon en la rueda de prensa conjunta que ofreció con su homólogo chileno, Sebastián Piñera, tras el encuentro que ambos mantuvieron en el Palacio de La Moncloa.
Sobre el estado del vicepresidente, que ayer fue ingresado en la UCI por complicaciones derivadas de una infección urinaria, Zapatero aseguró que Rubalcaba "se encuentra mejor, bastante mejor". Reconoció que, a diferencia de ayer, hoy no ha podido hablar con él y se ha limitado a mandarle un mensaje. Aunque no puso fecha a su vuelta al trabajo, el presidente recordó que "es muy trabajador" y se mostró convencido de que retomará pronto sus actividades.
Por último, bromeó que espera que Rubulcaba esta tarde pueda ver el partido del Barça con el Arsenal", porque "ayudará a su recuperación". El vicepresidente primero es un seguidor confeso del Real Madrid, mientras que Zapatero es un culé reconocido, por lo que dejó entrever que confía en que el Barcelona pase la eliminatoria de octavos de final de la Liga de Campeones y le restregó cariñosamente tal pronóstico a su número dos.
Menos dispuesto a entrar en el juego se mostró el presidente del Gobierno cuando, aprovechando que hoy se celebra el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, se le preguntó si le parece que España estaría preparada para tener una presidenta.
En principio, la única candidata a suceder a Zapatero en caso de que éste no se presentara a la reelección en 2012 sería la ministra de Defensa, Carme Chacón, quien, además, hace unas semanas se postuló indirectamente al insinuar que España estaría preparada para tener una presidenta catalana.
El presidente del Gobierno descartó responder a esta pregunta, que alude a su futuro al frente del PSOE, afirmando que "no es el día más apropiado y menos aquí", en el Palacio de La Moncloa, por tratarse de una cuestión eminentemente de partido. "No estoy muy por la labor", zanjó, con el semblante poco complacido del brete en el que le habían puesto.

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