Trabajar en la educación de hoy para cambiar el mundo de mañana

Educaixa, el programa educativo de la Fundación “la Caixa” promueve el talento joven para enfrentar los desafíos del mañana

OFRECIDO POR Fundación "la Caixa"

Fundación “laCaixa” lanza la nueva edición de The Challenge. Con el objetivo de seguir promoviendo la educación, la entidad pretende dar ese impulso a los más jóvenes para que lideren y desarrollen proyectos vinculados al cuidado del medio ambiente y la sostenibilidad, los principales retos de su generación.

The Challenge es una oportunidad para promocionar el talento joven, una propuesta educativa que motiva a alumnado y profesorado a seguir creciendo en competencias transversales y específicas desde cuatro premisas clave conocidas como las 4C: pensamiento crítico, creatividad, colaboración y comunicación.

Se trata de una iniciativa dirigida a profesores y estudiantes de 3º y 4º de la ESO, así como a alumnos y docentes de Bachillerato y ciclos formativos básicos y de grado medio, para que se comprometan con los desafíos del futuro y se impliquen en un proyecto de cambio que nos acerque a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Desde Educaixa defienden que la formación de excelencia es “clave” para dar oportunidades a las personas que pueden transformar nuestra sociedad.

The Challenge 2022: proyectos

Entre los 22 proyectos ganadores presentados en The Challenge 2022, destacan las monedas virtuales de Blood Broos, llevada a cabo por el Colegio de Fomento El Prado (Madrid). Una aplicación donde sus usuarios pueden recibir notificaciones sobre las necesidades de sangre que tienen los hospitales y los puntos más cercanos donde poder donar. Después, una vez realizada y registrada en la app, el donante recibe una determinada cantidad de ingresos o bloops que puede canjear más tarde por recompensas y descuentos en comercios locales y restaurantes asociados.

De los proyectos trabajados desde el programa de EduCaixa Jóvenes Emprendedores, también sobresale la propuesta del Colegio Nuestra Señora del Pilar (Valencia) para aprovechar el agua que malgastamos mientras nos duchamos. Recibe el nombre de CRAC (Circuito de Reutilizado de Agua a la Cisterna) y el propósito es el que recoge sus siglas: un sistema que reutiliza el agua de la ducha para llevarla más tarde hasta la cisterna del inodoro. “Nos encontramos ante una situación en la que no podemos permitirnos desperdiciar agua”, señalan sus autores.

Laura, alumna que partiicpa en el proyecto (Bio)lógica
Laura, alumna que participa en el proyecto (Bio)lógica.
FLC

Mientras, del programa ‘BeCritical’, creado para el desarrollo de la competencia mediática y el pensamiento crítico, salió el proyecto (Bio)lógica, el cual está basado en dar respuesta a los problemas medioambientales que, previsiblemente, se acontecerán en el futuro. Así, frente a la acumulación de residuos y la progresiva subida del precio de la luz, los alumnos del Colegio Nuestra Señora del Rosario (Rota), apuestan por invertir en biometanización. “Pensamos que es una idea coherente porque sería rentable económica y medioambientalmente”, defienden.

Otros estudiantes han puesto el foco en los recursos que España destina a la salud mental. “Nos mueve todas esas personas que alguna vez necesitaron ayuda y no la obtuvieron”, denuncian desde el Instituto de Enseñanza Secundaria Hermanos Argensola (Barbastro). El proyecto recibe el nombre de 5% que es, justamente, el porcentaje que el Gobierno destina a este campo. Por ello, proponen iniciativas para reclamar “medios suficientes” y a su alcance: “Pedimos concretamente la incorporación de la ayuda psicológica suficiente y gratuita en los centros educativos”.

“Pedimos la incorporación de la ayuda psicológica suficiente y gratuita en los centros educativos”

Por último, a través del programa ‘STEAMxChange’, una programación didáctica para la aplicación de métodos científicos en el aula a los retos relacionados con los ODS, nació el proyecto OnEarth. Un plan que persigue disminuir los niveles de contaminación, haciendo que toda la sociedad española participe en el reciclaje y respete las normas medioambientales, a través de un juego que ha diseñado un estudiante del Col·legi Padre Damián-Sagrados Corazones (Barcelona).

A partir del entretenimiento, se muestra cómo podría ser la Tierra en el año 3018 si no se actúa en consecuencia. “El proyecto tiene la finalidad de fomentar la concienciación y la acción de la población en el planeta para ayudar a reducir la contaminación de una forma divertida y lúdica”, detalla Alex Morera.

El alumno del proyecto 'OnEarth' Alex Morera, con sus padres Amalia y David.
El alumno del proyecto 'OnEarth' Alex Morera, con sus padres Amalia y David.
FLC

Apoyo para afrontar los retos del futuro

“En Fundación “la Caixa” somos conscientes de que la generación que educamos hoy es la que construirá el mundo de mañana”, aseguran. De hecho, es por esta razón que reconocen que The Challenge es “la gran apuesta” para conseguirlo. “The Challenge es la gran apuesta de EduCaixa para contribuir al cambio social e incentivar la transformación educativa. Una propuesta que otorga a los jóvenes de hoy en día las herramientas necesarias para desarrollar sus ideas y participar en la lucha por un mundo mejor”, insisten.

La nueva edición de este programa permite que este colectivo “pueda liderar sus proyectos con la mirada puesta en el progreso social”. “Es un ejemplo de cómo la educación es la palanca del progreso”, añaden. Así, con la premisa de que “el mundo de mañana depende de la educación de hoy”, Fundación “la Caixa” presenta la campaña sobre educación que tiene el propósito de hacer hincapié en el papel de la enseñanza en la sociedad. “The Challenge quiere contribuir a una educación de calidad a partir de retos en los que alumnado y profesorado desarrollan aprendizajes significativos, mejoran sus competencias y se aproximan a contextos reales”, trasladan desde la entidad.

“El mundo de mañana depende de la educación de hoy”

Y lo hace poniendo en valor las 4C como palanca clave para el cambio en las aulas. En primer lugar, promover el pensamiento crítico porque incita la argumentación a la hora de extraer conclusiones y resolver problemas. Por otro lado, fomentar la creatividad como una característica fundamental para afrontar estos retos pero integrando el concepto de la innovación. También impulsar el trabajo en equipo con la colaboración entre los distintos actores educativos para adquirir los mejores talentos tanto de alumnos como de profesores. Y, por último, potenciar la comunicación porque el uso correcto del lenguaje permite transmitir conocimiento de forma más eficaz.

Partiendo de esas 4C, una de las programaciones didácticas de EduCaixa para trabajar los ODS en el aula,  ‘BigData’, se centra en el desarrollo de la competencia digital. En este marco, se enseña al alumnado desde cómo se transportan los datos hasta cómo pueden ayudar a tomar decisiones, identificar patrones o definir tendencias.

‘Comunica’, por su parte, sirve para trabajar las habilidades comunicativas con metodologías activas y participativas centradas en la expresión oral y escrita, abordando cinco aspectos fundamentales: recitado, narración, argumentación, dramatización y exposición.

Por último, ‘Emociona’ se dedica a las capacidades socioemocionales, poniendo especial énfasis en el desarrollo de la autoconciencia, la gestión emocional, las habilidades sociales y el bienestar personal y comunitario.

Jóvenes comprometidos con el entorno

El objetivo de The Challenge es convertir a jóvenes talentos en worldshakers, es decir, en personas comprometidas con los problemas de nuestro tiempo y con las ganas y la capacidad necesarias para participar en el cambio social que se precisa.

De todos los proyectos que se trabajan durante el curso y se presentan a la convocatoria, se seleccionan los 100 mejores para participar en el Campus presencial en Barcelona. De aquí, los 20 mejores proyectos obtienen el premio final de viajar al extranjero. En la última edición, visitaron Silicon Valley, uno de los polos tecnológicos más importantes a nivel internacional. No obstante, los alumnos que participaron en los proyectos que llegaron al Campus de The Challenge tienen la oportunidad de presentar sus ideas a la incubadora NEXT, lugar donde sus propuestas pueden desarrollarse en el mundo real.