Según ha informado la compañía en una comunicación a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la facturación total de la compañía alcanzó los 12,6 millones de euros en el primer semestre, lo que representa una bajada del 23,4 por ciento respecto a los seis primeros meses del pasado ejercicio, cuando registró unos ingresos de 16,5 millones de euros de importe neto de la cifra de negocio.
Los ingresos por actividad inmobiliaria, especialmente ventas inmobiliarias, han ascendido a 4,1 millones de euros en el primer semestre, un 47,6 por ciento menos que en el mismo periodo del año anterior.
Por su parte, los correspondientes a servicios turísticos y golf se mantienen en 4,7 millones de euros, un 4,6 por ciento más que en 2016. La actividad hotelera refleja un leve descenso en las ventas en comparación con 2016, en concreto un 0,45 por ciento menos. Respecto a la actividad de golf, las ventas se han incrementado un 11,5 por ciento más en relación con el primer semestre del ejercicio anterior.
De esta forma, el resultado de explotación fue negativo, con 6,2 millones de euros de pérdidas, una cifra superior inferior a la del año pasado, que fue de -4,8 millones de euros.
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