El Ayuntamiento de Madrid sanciona a los taxistas y pide a la Policía que acabe con el "chantaje"

Madrid.- El Ayuntamiento de Madrid ha empezado a sancionar a taxistas que interrumpen el tráfico normal en la ciudad y ha pedido a la Delegación del Gobierno que, a través de la Policía, contribuye a estabilizar la situación y acabar con el "chantaje" de los conductores movilizados.

Fuentes del Ayuntamiento han dicho a Efe que el delegado de Seguridad y Movilidad, Pedro Calvo, se ha puesto en contacto con la delegada del Gobierno, Amparo Valcarce, para que ambas instituciones colaboren en normalizar el tráfico rodado en la ciudad.

Miles de taxistas, una parte de los cuales procedía de otras provincias, se han manifestado hoy por el centro de Madrid en una convocatoria fijada entre las 11 y las 13 horas, aunque desde horas antes y todavía en la tarde de hoy algunos de ellos alteran con su comportamiento el tráfico en la capital.

Por eso Calvo ha dado instrucciones a la Policía Municipal, que depende de su departamento, para que proceda a sancionar a los taxistas que corten el tráfico, un episodio que se está desarrollando en varios puntos de la ciudad durante la tarde de hoy, según las fuentes.

Esas acciones incluyen la apertura de expediente a los posibles taxistas infractores para futuras iniciativas.

La Policía Nacional puede colaborar con la Municipal a través de las órdenes de la Delegación del Gobierno y de un dispositivo conjunto acordado por Calvo y Valcarce, según las fuentes municipales.

Éstas han asegurado que el objetivo de esa cooperación es acabar con el "castigo" y el perjuicio que los taxistas han infligido durante la jornada a los ciudadanos madrileños, un hecho que consideran "intolerable".

La protesta de los taxistas a nivel nacional, aunque centrada en la manifestación de Madrid, se debe a su rechazo al artículo 21 de la llamada Ley Ómnibus que, según asociaciones de autónomos del sector, supondrá una fuerte liberalización.

Ya desde la pasada madrugada centenares de taxistas se habían concentrado en el Paseo de la Castellana de Madrid y, mientras hacían sonar el claxon de sus vehículos, causaban retenciones en dicha vía y en la Plaza de la Cibeles.

La situación se ha repetido después de la manifestación en varios puntos de la ciudad.