El hombre que mandó el primer e-mail en España no recuerda su contenido

Hace veinticinco años empezaban a surgir una gran cantidad de redes de datos, entre ellas internet. Juan Quemada, profesor en la Escuela de Técnica Superior de Ingenieros de Telecomunicación de la Universidad Politécnica de Madrid fue un pionero. Es el primer español que mandó un e-mail a través de la conocida red, cuando aún se encontraba en fase experimental.

“En Estados Unidos empezaban a usar una red llamada internet. Decidimos probarla y, como nos acabó encantando, les imitamos y empezamos a probar internet", indica Juan. "Existían servicios de correo, pero eran limitados, usados sobre todo por empresas", comenta.

"La red era interesante. Y Fernando Fourón, estudiante que realizaba su tesis doctoral en la escuela, también tenía la misma opinión. Así que decidimos experimentar y mandar el primer correo a través de Internet”, argumenta Quemada.

¿Y cuál fue el contenido del primer e-mail?"No nos acordamos del contenido del primer e-mail. Creo que debió de ser algo así como un mensaje de prueba, pero no estoy seguro. Luego ya empezamos a enviar mensajes personales entre los usuarios del sistema”, comenta Juan.

El primer e-mail se envió entre dos cuentas personales a través de la red europea EUNET. El correo salía de una cuenta del ordenador y pasaba por un servidor en Ámsterdam para volver a otra cuenta personal: "“El primer mensaje fue de una cuenta de correo de aquí a otra de aquí, pasando por un nodo de la Universidad libre de Ámsterdam", explica Juán. Luego le comentaron la idea al jefe del departamento, Juan Riera, que quedó encantado.

Internet se empezó a extender rápidamente, primero por todo el departamento de la Universidad y luego por las principales universidades españolas. El intercambio de correos electrónicos no era una novedad, pero sólo era posible realizarlo usando ordenadores de la misma marca, a través del software propio de cada compañía. "De ahí que internet creciera rápidamente", indica Quemada a la vez que afirma que "se trataba de un servicio universal, abierto, que permitía interconectar entre sí sistemas fuera cual fuera su origen”.

"Pronto se vió el potencial. Desde el primer momento en que lo probamos, descubrimos que podría dar servicio de correo a la Universidad. Y de ahí empezó a extenderse a las universidades punteras españolas”, señala.