Las entradas para visitar el Caminito del Rey de octubre a enero ya están a la venta

En total se pondrán a disposición de cualquier interesado en visitar este enclave natural situado en el Desfiladero de los Gaitanes, en la localidad malagueña de Álora, un total de 114.400 entradas, han informado, a través de un comunicado.

"Esperamos que tenga buena acogida esta nueva tanda de entradas, tanto entre los particulares que quieran visitarnos y también por parte de las agencias de viaje", ha explicado el gerente de la UTE Caminito del Rey, Francisco Campano, responsable de la gestión de este espacio, añadiendo que "sólo en verano hemos conseguido que más de 85.000 personas disfruten del Caminito".

Las entradas se mantienen a un precio de diez euros, dando además la posibilidad de adquirir en la propia plataforma de entradas y por 1,55 euros más el ticket para los autobuses lanzadera que permiten al visitante volver al punto inicial del recorrido.

Desde la reapertura del Caminito a finales de marzo de 2015 alrededor de 400.000 visitantes han disfrutado de este vertiginoso escenario, han apuntado. Esto supone que para finales de año más de medio millón de personas hayan cruzado las pasarelas del Caminito del Rey.

VISITAS GUIADAS

Las visitas guiadas que desde el pasado mes de junio se ofrecen han vuelto a convertir al Caminito del Rey en uno de los principales reclamos turísticos en los meses de verano, han destacado.

Las rutas guiadas permiten a los visitantes hacerse una idea de cómo se llevó a cabo esta obra de ingeniería de Rafael Benjumea; conocer el paso de la historia en este monumental escenario desde la época del Neolítico, pasando por la presencia de los árabes, hasta la era industrial.

Estas visitas en grupos reducidos de 25 personas se mantendrán durante este mes de agosto y septiembre. El pase, en este caso, tiene un coste de 18 euros (entrada general más guía). La utilización de audioguías permite que todos los visitantes puedan escuchar a lo largo del recorrido las explicaciones del guía gracias a un pequeño receptor y unos auriculares que son entregados a la entrada, han puntualizado.

Una solución idónea dadas las características de las pasarelas de largos tramos con apenas un metro de anchura, que impiden que el grupo de visitantes pueda situarse en corro alrededor del guía para escuchar sus exposiciones, han añadido.