Argel, 23 abr,.- El bastión de Mami Arnaut, en el puerto de Argel, la puerta de Bab Yedid, en la histórica Casba, o la gruta donde Miguel de Cervantes se ocultó durante uno de sus frustrados intentos de fuga son algunos de los lugares que conoció el escritor español durante sus cinco años de cautiverio en la capital argelina.
La embajada de España y el Instituto de Cervantes en Argel quieren ahora dar un impulso a estos lugares, especialmente a la cueva de Cervantes, para incluirlos dentro de los circuitos turísticos de Argel como la Ruta de Cervantes.
El objetivo "es integrar (la ruta) en los circuitos culturales de la ciudad", dijo a Efe la consejera de la embajada española, Cecilia García Gasalla, que indicó que, "visto el éxito" del año pasado, el primero en que se organizó la visita, en 2014 se ha ampliado el número de días y excursiones.
Además, se ha reservado un "tour" especial para representantes de los ministerios de Turismo y Cultura, así como del ayuntamiento de Beluizdad, donde se encuentra la gruta, para favorecer la implantación de este trayecto urbano.
Para el director de Comunicación y Cooperación del Ministerio de Turismo argelino, Husin Ambes, el objetivo de esta iniciativa es también contribuir al "refuerzo de los lazos entre Argelia y España, especialmente en los ámbitos cultural e histórico, que permiten un acercamiento de los dos pueblos".
La visita arranca en el conocido como Bastión 23, donde en la época de Cervantes habitaba el "Rais" Anaut. Desde su terraza se puede contemplar el puerto de Argel, donde arribaron y fueron vendidos los dos hermanos Cervantes (Miguel y Rodrigo), tal y como cuenta el guía de la excursión Hamid Ulias.
Cervantes, que portaba una carta de recomendación de Juan de Austria, fue tomado por un hombre de alto linaje y adquirido por Mami con la idea de obtener un buen rescate.
Pidieron quinientos escudos de oro por su libertad, una suma que la familia del soldado era incapaz de juntar.
Según cuenta Ulias, Cervantes definió a la antigua Icosium (Argel) en su obra "Los baños de Argel" como un "arca de Noé abreviada", debido a su cosmopolitismo.
Lugares como Bab al Ued o Bab Azun, dos de las seis puertas que daban acceso a la ciudad, aparecen en los escritos del artista inspirados en Argel.
Bab Yedid (la puerta nueva) es la segunda parada de la visita. Junto a ella se encuentra lo que queda de la antigua fortaleza, destruida en parte durante la ocupación francesa y en parte por el paso del tiempo.
Aquí, Cervantes también pasaría sus días, después de que su hermano fuera liberado por 300 ducados, y él fuera adquirido por Hasan Bacha el Veneciano, que en 1557 se convirtió en el regente de Argel.
La ruta concluye en la cueva donde Cervantes protagonizó su segunda tentativa frustrada de fuga, de las cuatro que llevó a cabo durante su cautiverio.
Situada en un farallón a tres millas al sur de la Casbah, Cervantes y varios compañeros esperaron inútilmente la llegada de un barco fletado desde España por su hermano y que debía llegar a rescatarlos.
Pero el barco nunca llegó, y los fugados acabaron siendo delatados y entregados de nuevo al Veneciano. Corría el año de 1577.
Tres años y dos intentos de huida después, el 19 de septiembre de 1580, dos monjes trinitarios hicieron entrega a sus captores del oro que finalmente le dio la libertad.
Ante las autoridades locales, el embajador español en Argelia, Alejandro Polanco Mato, subrayó que el impulso de la gruta se enmarca también en las actividades previstas por la embajada y el Instituto Cervantes para conmemorar en 2016 el 400 aniversario de la muerte del escritor del "Quijote".
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