La patronal de las motocicletas denuncia que el nuevo carné perjudicará a las ventas del sector

La Asociación Nacional de Empresas del Sector de Dos Ruedas (Anesdor) denuncia ante la Comisión Europea la ilegalidad de la aplicación anticipada en España de la Directiva Europea 2006/126/CE sobre unificación de permisos de conducción de motocicletas, lo que repercute negativamente en la industria española de las dos ruedas.
Según informó este lunes Anesdor, España "vulneró el derecho comunitario" introduciendo un nuevo esquema de permisos de conducción el pasado 8 de diciembre de 2009, cuando la Directiva establece que su entrada en vigor se producirá el 19 de enero de 2013 en todos los países de la UE.
Con esta denuncia ante la Comisión Europea, Anesdor persigue el doble objetivo de que se posponga la aplicación del nuevo esquema de permisos hasta enero de 2013 y que se articule un esquema menos exigente para los que tienen el permiso A2 y quieran obtener el A.
La aplicación "anticipada" e "ilegal" de esta Directiva dió como fruto la creación del permiso A2 para conducir motocicletas de hasta 35 kw de potencia y 48 CV, que no permite circular fuera de España porque no está reconocido legalmente por ningún Estado miembro de la UE hasta que entre en vigor la citada Directiva en 2013.
Por tanto, "la Administración española viola el derecho fundamental a la libre circulación dentro de la Unión Europea", afirman desde Anesdor.
Asimismo, en diciembre de 2011 se cumple el plazo de dos años en posesión del carné A2, requisito que el nuevo esquema de permisos exige para optar al carné A y poder conducir motocicletas de potencia superior a 35 kw.
Desde la patronal denuncian que, a falta de seis meses, no existe normativa que regule los requisitos de formación para el tránsito de un carnet a otro (del A2 al A). Es decir, los usuarios desconocen el número de horas de formación teórica y práctica que deberán cumplir, los centros autorizados para impartir esta formación así como el coste económico.
Por su parte, la Dirección General de Tráfico (DGT) trabaja en un borrador, "sin consulta a los representantes del sector de las dos ruedas", asegura Anesdor, en el que se detalla la formación para obtener "el permiso A más caro y difícil de Europa".