Sídney (Australia), 20 feb.- El misionero australiano detenido en Corea del Norte admitió a las autoridades norcoreanas que uno de los propósitos de su viaje era repartir panfletos cristianos entre la población, un delito en el país comunista que conlleva 15 años de prisión, según medios locales.
La policía de Pyongyang detuvo e interrogó el pasado domingo al ciudadano australiano John Short, de 75 años y residente en Hong Kong, quien había entrado en la república un día antes en un viaje turístico.
Desde entonces, las autoridades norcoreanas han prohibido a Short abandonar el país comunista.
El compañía china de turismo con la que viajaba Short informó al canal "ABC" que el australiano había admitido a las autoridades de Corea del Norte que "hacer turismo" no era su único propósito en el país.
Durante el registro de las pertenencias del Short, las autoridades del país comunista encontraron testamentos en idioma coreano.
Las autoridades suecas están representando los intereses del australiano retenido, ya que el Departamento australiano de Asuntos Exteriores no cuenta con servicios consulares en la república coreana.
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