¿Y si se pudiera volver atrás? Casi la mitad de los españoles trabajaría en otra cosa

¿Tienes entre 35 y 44 años? ¿Ingresos medios tirando a bajos?¿Nunca llegaste a la universidad? Pues seguramente estás harto de tu profesión y pagarías gustoso un viaje en la máquina del tiempo al momento en que decidiste a qué te ibas a dedicar.

Pero no estás solo. El 45% de los españoles piensa lo mismo y cambiaría su decisión si pudiera. Según una encuesta realizada por Adecco, casi la mitad de los trabajadores del país se arrepiente de lo que hizo, aunque la decepción es mayor entre los que rondan los cuarenta.

Todo ello no quita, sin embargo, que la mayoría de los españoles acepte lo que tiene y ocho de cada diez dice ser feliz en su empleo. Eso sí, la mitad estaría dispuesto a variar para ser aún más feliz.

En lo que están casi de acuerdo unánimamente los trabajadores en España es en que la felicidad redunda directamente en la productividad: un 97% cree que si fuera feliz en lo que hace el rendimiento sería netamente superior.

Siempre según la encuesta de Adecco, para estar más satisfecho en su puesto, los entrevistados destacan sobre todo el buen ambiente laboral, seguido del sueldo y de la realización personal. El buen horario y el desarrollo de las habilidades personales completan las cinco primeras preferencias.

Ya con menor importancia, y de las diez razones propuestas, la que menos peso recibe (y aun así obtiene una nota media del 7,2 en las respuestas) son los beneficios sociales. La segunda cuestión menos relevante sería la cercanía al lugar de trabajo y, a continuación y por este orden inverso, el reconocimiento entre los colegas y los superiores, el jefe y la adecuación de las funciones a la capacidad de cada uno.   

Las mujeres, en mayor medida que los hombres, consideran más importantes todos y cada uno de los factores anteriores. La edad sí marca diferencias: los de mayor edad destaxcan el desarrollo de sus habilidades, la cercanía y los beneficios sociales. Los jóvenes, en cambio, prefieren la realización personal y tener un buen jefe.

En lo que respecta a la división por ingresos, los de mejor sueldo quieren un puesto adecuado a su formación y sentirse realizados, mientras que los que cobran menos se fijan particularmente en la cercanía y el desarrollo de las habilidades.

Por lo general, el grupo de edad comprendido entre los 35 y los 44 años aglutina mayores niveles de insatisfacción. Por ejemplo, un 63% de estos encuestados creen claramente que la felicidad en el trabajo va disminuyendo con el tiempo, que a mayor edad, más decepción. Sin embargo, entre los veteranos este porcentaje baja al 54%.