Francia se blinda para garantizar las seguridad durante las elecciones

El terrorismo volvió a golpear este jueves al corazón de Francia. El atentado en los Campos Elíseos de París, que se cobró la vida de un policía, ha subrayado la vulnerabilidad de Europa ante los atentado yihadistas y busca influenciar al electorado indeciso a pocas horas de la elección. Salir a votar este domingo en Francia será un acto de coraje, resistencia y libertad.

Para garantizar la seguridad de la votación, estarán movilizados más de 50.000 policías y gendarmes, apoyados por 7.000 militares de la operación Centinela, desplegados en permanencia en el territorio nacional desde los atentados yihadistas de enero de 2015 en París. Fuentes de la policía francesa han explicado a www.lainformacion.com que “se desplegarán las unidades de intervención especial y los GEO, así como francotiradores en puntos clave”. Pero el número de efectivos que vele por la seguridad de los ciudadanos “no se aumentará porque el despliegue ya es inmenso.”

Las fuerzas de seguridad velarán por los ciudadanos y tienen como misión asegurar los 67.000 lugares de votación. Cada presidente de mesa contará con un número especial para llamar a las fuerzas de seguridad en caso de emergencia. Por su parte, los candidatos tendrán una protección reforzada.El atentado en los Campos Elíseos sacude la campaña

Este escenario era muy temido tras la ola de atentados yihadistas y es gasolina para los partidos extremistas, como el de Marine Le Pen. El candidato de Los Republicanos, François Fillon, y la candidata ultraderechista del Frente Nacional, Marine Le Pen, proponen “guerra radical al islamismo” y ella, “el cierre inmediato de las fronteras nacionales y la expulsión de los sospechados de terrorismo con ficha S”.

No en vano, ellos dos pueden ser los beneficiados del atentado del jueves por la noche. Le Pen por sus comentarios contra el terrorismo y el Islam, a los que equipara, y Fillon por su experiencia institucional que le convierte en el candidatos más apto para lidiar con este asunto.

Desde 2015, en Francia han muerto 230 personas en atentados terroristas de inspiración islamista. La alerta yihadista llevó al gobierno de Hollande a declarar el estado de emergencia, en vigor desde noviembre de 2015 y que se prolongará hasta el próximo verano.