Las Naciones Unidas están movilizando a unos 300 efectivos de cuerpos de paz desde el este de la República Democrática del Congo a Kinshasa para ayudar a lidiar con un posible estallido de violencia por la postergación de las elecciones presidenciales, dijeron el martes funcionarios de la ONU.
Los soldados y policías de la fuerza presente en el Congo denominada la MONUSCO estarán estacionados en Kinshasa, donde protestas violentas dejaron 49 muertos el mes pasado, dijeron los funcionarios del organismo.
"Estamos planeando acciones para todas las eventualidades y hemos tomado medidas para fortalecer nuestra posición en Kinshasa", dijo el jefe de mantenimiento de la paz de la ONU, Herve Ladsous.
Sin embargo, los refuerzos probablemente no serán suficientes si el capital ve surgir la violencia generalizada, advirtió.
"Es importante tener en cuenta que Kinshasa es una ciudad de casi 11 millones de personas y la MONUSCO no tiene ni el poder humano ni el mandato de proporcionarle seguridad", dijo.
La tensión política ha ido en aumento por el aparente intento del presidente Joseph Kabila de aferrarse al poder que ejerce desde 2001.
El lunes se llegó a un acuerdo para postergar la elección presidencial, fijada para este año, de nuevo para abril de 2018. Sin embargo, partidos de oposición boicotearon el acuerdo y llamaron a realizar una gran protesta el miércoles.
El enviado de la ONU para la República Democrática del Congo, Maman Sambo Sidikou, advirtió la semana pasada que el país había entrado en un período de "riesgo extremo para su estabilidad", diciendo que "la violencia a gran escala es casi inevitable" si no se hace nada frente a la crisis.
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